Nuevo capítulo en la auditoría a la UBA: el Gobierno busca mayor transparencia en el financiamiento universitario

Este lunes, la discusión sobre el financiamiento de las universidades en Argentina dio un giro significativo cuando la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) presentó la documentación que marca el inicio de una auditoría a la Universidad de Buenos Aires (UBA). Este paso ha suscitado un debate intenso en el ámbito político y educativo.

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El Ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, anunció que las compras realizadas por las universidades serán integradas al sistema de compras públicas, lo que implica un mayor control sobre los gastos. "La transparencia será clave: todos los salarios y gastos deberán estar registrados en el Sistema Integrado de Información Financiera (SIDIF)", explicó Sturzenegger, quien aseguró que esta medida no afectará la autonomía de las instituciones educativas, permitiendo a las universidades decidir sobre sus gastos mientras el Gobierno obtiene una visión más clara de las inversiones.

Sturzenegger se mostró firme en su postura, afirmando que la auditoría llevará a una mayor transparencia en las universidades. Sin embargo, la decisión de que la SIGEN realice las auditorías ha reavivado las tensiones con la UBA. El rector Ricardo Gelpi declaró que recurrirán a la Justicia para cuestionar la legitimidad del organismo encargado de la auditoría, subrayando que, aunque no se oponen a las auditorías, consideran que la SIGEN carece de competencias jurídicas adecuadas para este proceso.

El Ministro de Desregulación del Estado, Federico Sturzenegger, anticipó que en los próximos días publicarán una serie de modificaciones respecto a las erogaciones universitarias.

La situación se complica aún más con la reciente veto del Presidente a la Ley de Reforma Jubilatoria, apoyada por el PRO y la UCR, así como a la Ley de Financiamiento Universitario. Sturzenegger criticó al Congreso, comparando su actitud con la de un niño frente a un adulto, sugiriendo que la oposición busca debilitar al Gobierno en un contexto de esfuerzos por consolidar un superávit fiscal.

En el ámbito laboral, el ministro señaló que la reforma propuesta permite que sindicatos y empresas negocien desvinculaciones, enfatizando la necesidad de una reforma que beneficie a ambas partes. Sturzenegger destacó que el objetivo es modernizar las leyes laborales en el país, a pesar de las críticas hacia el estilo de liderazgo del presidente Javier Milei.

La reglamentación de esta reforma, publicada en septiembre, marca un avance en el objetivo del Gobierno de llevar a cabo una modernización histórica de las leyes laborales, según afirmó el ministro. Sturzenegger concluyó afirmando que el verdadero desafío radica en cómo se gestionan las instituciones en un momento crítico para la democracia, contrastando la administración actual con la anterior, que, según él, violó libertades civiles esenciales.

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Con la auditoría a la UBA y la reforma laboral en el horizonte, el Gobierno busca implementar cambios significativos en el panorama educativo y laboral del país, en medio de un clima de intensas discusiones políticas.