29/11/2024
En su Informe de Coyuntura Industrial Pyme de noviembre, Industriales PyMEs Argentinos (IPA) advirtió que, de continuar las actuales medidas económicas ejecutadas por el gobierno de Javier Milei, el año que viene podrían cerrar 25.000 PyMEs y perderse 300.000 puestos de trabajo registrados.
Según el estudio, la economía argentina se enfrenta a un panorama complejo, marcado por una contracción proyectada del Producto Bruto Interno (PBI) de entre 2,5% y 3,2% para 2024, según datos oficiales. Si bien algunos sectores primarios, como la agricultura y la minería, mostraron una recuperación post-sequía impulsando las exportaciones (un 15% interanual), la situación para la industria manufacturera y la construcción es crítica, reflejando una caída en el empleo registrado superior a 176.000 puestos en los siete meses del año.
Empleo
La evolución del empleo
registrado en Argentina refleja una tendencia a la baja en términos
interanuales. Según los datos proporcionados por el Boletín Estadístico Mensual
de octubre de 2024, publicado por la Superintendencia de Riesgos del Trabajo
(SRT), la cantidad de empleados registrados en julio de 2024 fue de 9.597.004,
lo que representa una disminución de 176.531 puestos de trabajo en comparación
con los 9.773.535 registrados en el mismo mes de 2023. Este descenso interanual
refleja la pérdida de empleo registrado en diversos sectores de la economía.
Además, durante el mismo período, el número de empresas registradas pasó de
499.485 a 509.284, lo que refleja una disminución de 9.799 empresas.
En cuanto al sector manufacturero, la situación no es diferente. En julio de 2024, el número de empleados registrados en la industria manufacturera fue de 1.168.187, lo que representa una caída de 45.812 puestos de trabajo respecto a los 1.213.999 empleados registrados en el mismo mes de 2023. Asimismo, la cantidad de empresas manufactureras registradas pasó de 49.163 a 48.683, con una pérdida de 480 empresas manufactureras durante el mismo período. De los 176.531 puestos de trabajo perdidos en términos interanuales, 100.206 corresponden al sector de la construcción (lo que representa el 57% del total), 45.812 a la industria manufacturera, y 30.513 a otras categorías de empleo, tales como servicios, empleo público y otros sectores.
"Si bien estos datos
son preocupantes, el impacto del desempleo podría ser aún mayor, si se incluyen
los empleos no registrados y los beneficiarios de programas sociales, cuya
medición, no obstante, excede el alcance de este informe", indicó el informe.
Importaciones
y competitividad
Según análisis
económicos recientes, este contexto de recesión se agrava para las pequeñas y
medianas empresas (PyMEs), que se ven asfixiadas por una combinación de
factores. La inflación, que alcanza un
107% acumulado a octubre de 2024, la falta de financiamiento y la
flexibilización de las importaciones se presentan como los principales obstáculos
para su crecimiento y supervivencia.
En esa línea, la cámara
señaló que, a pesar de una caída del 24% en las importaciones totales, reflejo
de la menor demanda interna, el impacto en las PyMEs es significativo. La falta de competitividad, la dificultad
para acceder a mercados internacionales y el elevado costo de importar y
exportar limitan su expansión. Análisis
económicos señalan que las políticas económicas actuales favorecen a las
grandes empresas, dejando a las PyMEs en una posición desventajosa.
La apreciación real del tipo de cambio, resultado de políticas monetarias y un superávit comercial, brinda cierto alivio a nivel macroeconómico. Sin embargo, la estabilidad de la divisa se ve amenazada por los vencimientos de deuda de 2025 y la creciente demanda de dólares. La actividad industrial, aunque muestra una leve recuperación intermensual desde julio, se mantiene por debajo de los niveles de años anteriores. La mejora en sectores primarios no compensa el declive en la industria manufacturera y la construcción, sectores claves para la generación de empleo.
El panorama para 2025
depende crucialmente de la implementación de políticas económicas de la actual
administración, que impulsen una recuperación sostenida. El informe subrayó
que, si bien se espera una estabilización gradual en la industria y la
construcción, "superar las barreras estructurales y mejorar la
competitividad será fundamental".
El acceso al financiamiento y a los mercados
internacionales resulta crucial para la supervivencia de las PyMEs, un sector
clave para el desarrollo económico del país. La recuperación económica podría
ser más palpable en la segunda mitad de 2025, siempre y cuando se logre una
estabilidad política y un contexto externo favorable. "La situación de las PyMEs, sin embargo,
requiere una atención inmediata y medidas concretas para evitar un mayor
deterioro del tejido productivo argentino", remarcó.
Pérdidas
de empresas
El presidente de IPA, Daniel Rosato, dijo que "las
PyMEs continúan enfrentando serias dificultades para competir en el mercado
interno y acceder a mercados internacionales". "Las políticas
económicas han favorecido a las grandes empresas", añadió. Hizo hincapié
en que "la situación es preocupante para la industria manufacturera, textil,
calzado, bienes de capital".
"El Gobierno, a través de medidas como la quita de
aranceles, genera una gran preocupación porque no hay un aumento de
importaciones de materia prima, sino de productos terminados", destacó,
señalando que "el sector de petróleo y gas hoy está tranquilo porque si no hay
levantamiento del cepo, no hay inversiones", consignó el sitio de noticias
"Minutouno".
"Si se levanta el cepo y no se baja el costo de
energía, que triplica el precio internacional, en 2025 vamos a tener una
pérdida de 25.000 PyMEs a nivel nacional y 300.000 puestos de trabajo. Vamos a
perder un 5% de las empresas que producen y conforman la economía real en la
Argentina", advirtió Rosato.
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