Tras más de tres décadas de negociaciones, el Mercosur y la Unión Europea anunciaron su acuerdo comercial

La Unión Europea (UE) y el Mercosur concretaron este viernes un entendimiento para avanzar en un tratado de libre comercio que llevaba años estancado. Sin embargo, el pacto enfrenta ahora un complicado camino hacia su aprobación en el seno de la UE, donde países como Francia han manifestado una firme oposición.

El anuncio fue realizado en Montevideo por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, junto a los presidentes de los países que integran el Mercosur. Este logro llega tras más de dos décadas de negociaciones y cinco años después de que se alcanzara un acuerdo inicial.

"Este es un acuerdo en el que todos ganan", destacó von der Leyen durante una conferencia de prensa en la que estuvo acompañada por los mandatarios de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay.

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Además, subrayó que el tratado tiene una importancia que va más allá de lo comercial: "Este acuerdo no es sólo una oportunidad económica, es una necesidad política. Sé que vienen fuertes vientos en dirección contraria, hacia el aislamiento y la fragmentación, pero este acuerdo es nuestra respuesta".

Von der Leyen también resaltó que el pacto establece un mercado con un potencial de más de 700 millones de personas.

A pesar de este avance, Francia se ha posicionado como el principal crítico dentro de la UE, calificando el acuerdo como "inaceptable". La ministra francesa de Comercio, Sophie Primas, reiteró su rechazo al tratarse de cuestiones relacionadas con el medio ambiente y la agricultura, comprometiéndose a frenar el proceso en las etapas futuras.

Foto de familia. Von der Leyen junto a Milei, Lacalle Pou, Lula da Silva y Peña en Montevideo (Foto: Reuters).

Desde el Mercosur, el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou expresó una visión más optimista aunque cautelosa: "Un acuerdo de este tipo no es una solución, no hay soluciones mágicas (...) es una oportunidad y estará en cada uno de nosotros la velocidad que le demos a este acuerdo, cada uno en nuestros países".

Para que el tratado sea ratificado, necesitará el respaldo de al menos 15 de los 27 países miembros de la UE, que en conjunto representen el 65% de la población del bloque, además de una mayoría simple en el Parlamento Europeo.

A pesar de los obstáculos, los representantes sudamericanos confían en que la UE logrará superar las resistencias y evitar que Francia pueda formar una minoría de bloqueo.

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Durante su intervención, von der Leyen también enfatizó: "Los acuerdos de comercio son más que acuerdos económicos. Este nos asegura que las inversiones respeten el patrimonio natural que tiene el Mercosur. Ambas partes ganan", indicó.

Finalmente, von der Leyen destacó los beneficios mutuos: "Estamos enfocados en la justicia y el respeto mutuo. Esto es una ganancia para Europa también: 60.000 empresas están exportando actualmente al Mercosur. Para nuestros productores, les digo que los hemos escuchado. Este acuerdo incluye salvaguardas robustas para protegerlos. Este acuerdo abre empleos a ambas partes".

"Este es un buen día para el Mercosur, para Europa y un momento histórico. Toda una generación dedicó su esfuerzo a traer este acuerdo y hacerlo realidad. Aseguremos que este acuerdo produzca todo lo prometido y ayude a las generaciones futuras", concluyó la funcionaria del viejo continente.