Lorenzetti apuntó contra el resto de los integrantes de la Corte

El ministro de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, expresó fuertes críticas hacia sus colegas del tribunal al manifestar su disidencia en dos recientes acordadas. Estas resoluciones designaron a un nuevo Secretario de Desarrollo Institucional y delegaron diversas funciones al Secretario General de Administración. Según el magistrado, estas medidas implican un cambio significativo y problemático en el funcionamiento del máximo tribunal.

En una de las decisiones, los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda aprobaron el nombramiento de Juan Pablo Lahitou como Secretario de Desarrollo Institucional. Lorenzetti cuestionó esta decisión argumentando que, desde que se propusieron a Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla como nuevos integrantes del tribunal, se han creado numerosas oficinas y cargos innecesarios.

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"Desde que se anunció la nominación de dos nuevos jueces, se han creado cantidades increíbles de oficinas sin sentido, cargos de secretarios de Corte como nunca hubo en el Tribunal, secretarios letrados, acordadas para poner en cabeza de otros funcionarios decisiones de superintendencia que corresponden a los jueces de la Corte, fijación de reglas generales para que las causas sean juzgadas por conjueces, presiones a los secretarios de Corte para que se jubilen, y designaciones de personas sin concurso ni experiencia con la sola prueba de la vinculación con algún ministro y otras más que se enunciarán en considerandos posteriores", cuestionó.

Lorenzetti también apuntó que estas decisiones han provocado un aumento innecesario de gastos y una gestión deficiente de los fondos anticíclicos, lo que afecta directamente el funcionamiento del Poder Judicial y los recursos disponibles para garantizar un servicio adecuado.

"Es una falta de respeto a la sociedad, que ha reclamado austeridad en el Estado, y es una falta de respeto al resto del Poder Judicial, que carece de los recursos necesarios para brindar un adecuado servicio de justicia a la población. Que, es evidente que se trata no sólo de un fin de año, sino de un fin de ciclo, y es relevante que la sociedad conozca las posiciones en la Corte Suprema de Justicia de la Nación", señaló.

Magistrados. Lorenzetti (el primero a la derecha) hizo públicas una vez más sus diferencias con sus pares.

Además, el juez cuestionó una segunda acordada que delega amplias funciones administrativas al Secretario General de Administración. Según el tribunal, esta medida busca agilizar procesos internos. Sin embargo, para Lorenzetti, representa una decisión "ilegal" y sin precedentes que compromete la independencia judicial. La resolución otorga al secretario competencias en áreas como licencias, jubilaciones, contratos y la administración de bienes judiciales. Lorenzetti subrayó que concentrar estas decisiones en un funcionario no concursado es un precedente peligroso.

Por otra parte, destacó que el tribunal enfrenta un atraso sin precedentes, con más de 87.000 causas pendientes, lo que evidencia, a su juicio, un desequilibrio entre la gestión administrativa y la función principal del cuerpo: resolver casos de trascendencia institucional.

Finalmente, Lorenzetti expresó preocupación por el impacto de estas medidas en la seguridad jurídica. En relación a las nuevas reglas sobre conjueces advirtió que tiene "el claro objetivo de que muchos casos no sean resueltos por los jueces del tribunal".

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"Es algo que nunca existió en toda la historia del Tribunal. Afectará la seguridad jurídica de los precedentes, porque al cambiar los conjueces, cambiarán los precedentes, y además, motivará presentaciones de nulidades", remarcó.

El magistrado concluyó su disidencia enfatizando que estas disputas internas han socavado la labor prioritaria del tribunal y generan incertidumbre sobre el futuro de su funcionamiento.