27/12/2024
El fiscal Tarek William Saab dio a conocer este viernes que Nahuel Agustín Gallo fue imputado por la Justicia de dicho país. Además, acusó a la Argentina de "apoyar planes subversivos".
El caso del gendarme argentino Nahuel Agustín Gallo, detenido en Venezuela desde el 8 de diciembre, sumó un nuevo capítulo este viernes luego de que la Justicia Bolivariana imputara formalmente al joven.
A través de un comunicado, el fiscal general venezolano, Tarek William Saab, aseguró que Gallo intentó ingresar al país "de manera irregular" y "ocultó su verdadero plan criminal bajo el ropaje de una visita sentimental".
"Habiéndose cumplido con los plazos procesales correspondientes según lo prevé el Código Orgánico Procesal Penal, el Ministerio Público informa que el Sr. Nahuel Agustín Gallo ha sido detenido al haber intentado ingresar irregularmente a la República Bolivariana de Venezuela ocultando su verdadero plan criminal bajo el ropaje de una visita sentimental", remarcaron desde el Ministerio Público Fiscal venezolano.
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El texto añadió que Gallo estaría vinculado con "un grupo de personas que intentaron desde nuestro territorio y con apoyo de grupos de la ultraderecha internacional ejecutar una serie de acciones desestabilizadoras y terroristas".
Al conocerse la noticia, la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, salió a defender públicamente al gendarme y solicitó su inmediata liberación.
"Nahuel Gallo no es un terrorista, es un ciudadano argentino, que fue a Venezuela como papá", enfatizó la funcionaria en conferencia de prensa junto al canciller Gerardo Werthein. Según ambos, las acusaciones de Venezuela son un "invento horrible".
Acusación. El fiscal general venezolano, Tarek William Saab, está detrás de la investigación contra Gallo.
Werthein detalló que Gallo "entró con todos los papeles legales, hizo todos los trámites que tenía que hacer y hasta pagó las tasas que había que pagar". Además, destacó que el gobierno argentino recibió un informe oficial de Venezuela que asegura que Gallo se encuentra detenido bajo proceso judicial y en condiciones que respetan su integridad física, psicológica y sus derechos humanos.
Sin embargo, agregó que el fiscal venezolano ha emitido acusaciones "falsas" sobre una conspiración, algo que calificó como parte de una "gran falacia".
El comunicado del Ministerio Público venezolano también apuntó a una supuesta complicidad de las autoridades argentinas, afirmando: "Las declaraciones y acciones realizadas por el Gobierno argentino, utilizando a los familiares del procesado, así como la resolución judicial tomada por la Cámara Federal de Mendoza, dejan clara la complicidad de las autoridades de esa Nación en los planes subversivos que buscan atacar por cualquier vía al Estado venezolano y a sus instituciones legítimas".
Bullrich rechazó esas afirmaciones y subrayó que "lo que no fue legal fue la forma en la que lo secuestraron en la frontera". Explicó que Gallo viajaba con pasajes de ida y vuelta y tenía la intención de visitar a su esposa, María Alexandra Gómez, y a su hijo de dos años, con quienes planeaba regresar a Argentina el 30 de diciembre.
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En la conferencia de prensa, Bullrich y Werthein enfatizaron que el gobierno argentino está realizando gestiones a través de distintos canales diplomáticos y legales para lograr la liberación de Gallo.
Werthein destacó la cooperación de Brasil en el proceso y aseguró que Argentina, desde el presidente hasta los funcionarios involucrados, está "haciendo todos los esfuerzos para poder terminar con esto que es una gran mentira".
La situación mantiene en vilo a los familiares de Gallo, quienes han recibido información sobre los avances de las gestiones realizadas por el gobierno argentino para lograr su regreso. Mientras tanto, la disputa entre ambos países refleja tensiones diplomáticas que continúan escalando.
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