Se cumplen diez años de la muerte del fiscal Alberto Nisman

El 18 de enero de 2015, pocas horas antes de su esperada presentación ante el Congreso para exponer detalles sobre su denuncia de encubrimiento a Irán, el fiscal Alberto Nisman fue encontrado sin vida en su departamento de Puerto Madero.

Desde entonces, el caso ha estado rodeado de dudas y controversias, vinculándose rápidamente con operaciones de inteligencia y disputas internas en la SIDE.

A una década de los hechos, la Justicia sostiene que la muerte de Nisman fue un homicidio relacionado con su denuncia contra la entonces presidenta Cristina Kirchner por la firma del Memorándum con Irán tras el atentado a la AMIA. Además, las investigaciones avanzan para esclarecer el rol de los servicios de inteligencia en los días cercanos a su fallecimiento.

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El cuerpo del fiscal apareció en el baño de su departamento con un disparo en la cabeza. El arma utilizada había sido facilitada poco antes por Diego Lagomarsino, el único procesado en una causa que ya lleva diez años.

Según la investigación liderada por el fiscal Eduardo Taiano, "Nisman fue víctima de un homicidio y su muerte estuvo motivada en su labor en la UFI-AMIA y, concretamente, con su accionar vinculado al Memorándum de Entendimiento con la República de Irán". El informe reciente resalta la intención de determinar tanto a los autores materiales como a quienes dieron la orden del crimen.

El 18 de enero, cerca de las 22:32, tras la intervención de un cerrajero que abrió una de las puertas del departamento en las torres Le Parc, Nisman fue hallado en el baño de su dormitorio con el disparo fatal. La investigación reveló irregularidades en la escena, como la desidia de los cuatro custodios asignados a Nisman aquel fin de semana y la actividad de inteligencia de ex agentes de la AFI y el Ejército.

Marcha del silencio. Manifestación en pedido del esclarecimiento de la muerte del fiscal Alberto Nisman.

Lagomarsino afirmó que Nisman le solicitó el arma por temor a su seguridad. Según su versión, el fiscal lo llamó para pedirle que se dirigiera a su casa, donde le habría solicitado el arma.

Sin embargo, "a raíz de medidas probatorias realizadas en el marco de la investigación esa versión de los hechos fue desvirtuada, ya que las comunicaciones fueron iniciadas por el propio Lagomarsino, resultando este accionar parte del plan para la simulación del suicidio", señala un informe del 8 de enero.

La investigación también indaga sobre agentes "inorgánicos" de inteligencia que vendían información y sus posibles vínculos con el caso. En este contexto, se solicitó la ampliación de la desclasificación de archivos relacionados con la labor de Nisman en la UFI-AMIA. Desde el traslado de la causa a Comodoro Py, se han realizado más de 900 declaraciones, analizado 180 computadoras, cruzado 500 números telefónicos y revisado 200 mil comunicaciones.

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Durante 2024, las imputaciones avanzaron hacia exfuncionarios, incluyendo a Sergio Berni, entonces secretario de Seguridad, por presuntas irregularidades en las primeras horas tras el hallazgo del cuerpo. La escena del crimen fue vulnerada con "entradas y salidas de distintos funcionarios" y una demora injustificada en la intervención judicial. Según los investigadores, "hasta el momento no se ha brindado ningún tipo de justificación o asignación a tarea específica que sustente este accionar, que atentó directamente contra la preservación de la escena".

El análisis del departamento donde vivía Nisman dejó en evidencia más anomalías. Recién horas después se detectó una puerta en la cocina que daba acceso a un área común, donde se encontró una huella no identificada. El lugar era adyacente a un departamento habitado por un extranjero vinculado a servicios de control de acceso y con supuestos lazos con el entonces secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández.

Además, un incendio ocurrido ese fin de semana en la Casa Rosada destruyó registros de entradas y salidas, prueba que Nisman había mencionado en su denuncia contra el Memorándum. Dentro del departamento del fiscal, más de 80 personas circularon sin justificación, afectando potencialmente las pruebas disponibles.

Días antes de su muerte

Rueda de prensa. Nisman causó revuelo cuando acusó al Gobierno de haber negociado un pacto de impunidad con Irán.

El 14 de enero de 2015, Nisman presentó una denuncia penal contra Cristina Kirchner, parte de su gabinete y otros implicados por encubrimiento agravado del atentado a la AMIA. Acusó al gobierno de haber negociado un acuerdo con Irán para garantizar impunidad a los responsables del ataque mediante el Memorándum firmado en 2013.

El fiscal denunció que la maniobra incluía la creación de una "Comisión de la Verdad", cuyo objetivo era deslegitimar la investigación, desvirtuar pruebas y habilitar la posibilidad de encontrar nuevos responsables, favoreciendo a los acusados originales.

Según la fiscalía, "resulta evidente el vínculo existente entre la labor llevada adelante por Nisman en la investigación del atentado a la sede de la AMIA, plasmada en sus dictámenes, y su fallecimiento: una sentencia de muerte pesaba sobre su cabeza como consecuencia de la aceptación por parte de Interpol del libramiento de las circulares rojas de los acusados iraníes". Los investigadores concluyen que, tras denunciar públicamente el intento de evitar el cumplimiento de esas circulares, "fue asesinado en su domicilio".

La denuncia contra el Memorándum finalmente llegará a juicio oral, después de que la Corte Suprema rechazara los recursos de los acusados en diciembre, allanando el camino para que el debate se programe durante 2025.