Adiós al Papa Francisco: multitud en San Pedro y filas interminables en Roma para honrarlo

Misa de luto en San Pedro: el mundo joven honra a Francisco

Este domingo, más de 250.000 fieles, en su mayoría jóvenes, llenaron la Plaza de San Pedro y la Vía de la Conciliación en una emotiva misa de luto por el Papa Francisco. La ceremonia, que iba a ser la canonización de Carlo Acutis en el marco del Jubileo de los Adolescentes, se transformó en un sentido homenaje al pontífice fallecido.

La masiva afluencia obligó a las autoridades a cerrar los accesos una hora antes del inicio de la misa, dejando a unas 50.000 personas fuera de la plaza. Esta fue la segunda de las tradicionales "Novendiales", las nueve misas de luto que anteceden al Cónclave para elegir al nuevo Papa, previsto para comenzar entre el 5 y 6 de mayo.

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El legado de Francisco, en palabras del cardenal Parolin

La misa fue celebrada por el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado y uno de los nombres que suenan fuerte para suceder a Francisco. Durante su homilía, Parolin instó a los presentes a "acoger el mensaje (del Papa) y hacerlo vida".

"Nuestro afecto por él, que se está manifestando en estas horas, no debe actuar como una emoción del momento, debemos acoger su legado y hacerlo vida, abriéndonos a la misericordia de Dios y siendo también nosotros misericordiosos, los unos con los otros", expresó el cardenal ante una plaza conmovida.

Entre los presentes, jóvenes de todo el mundo expresaron su dolor pero también su esperanza. "La muerte del Papa el día de Pascua es una señal de esperanza", sostuvo Roberto, un joven ecuatoriano de 17 años.

Parolin también se dirigió especialmente a la juventud, aludiendo a los "desafíos" que enfrentan, como "la tecnología y la inteligencia artificial". Y recordó que "Francisco nos ha recordado que no puede haber paz sin que reconozcamos los valores del otro, sin la atención al que es más débil y, sobre todo, que no puede haber nunca paz si no aprendemos a perdonarnos", generando un emotivo aplauso.

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Espera. Largas filas en la Basílica de Santa María la Mayor para ver el féretro del Papa Francisco.

El último descanso de Francisco en Santa María la Mayor

Miles de fieles también se acercaron este domingo a la Basílica de Santa María la Mayor, donde descansan los restos de Jorge Bergoglio. Desde temprano, largas filas se formaron para visitar su tumba, que fue abierta al público tras la ceremonia privada del sábado.

Siguiendo su deseo expresado en su testamento, el Papa Francisco fue sepultado bajo una lápida sencilla de piedra de Liguria, con la inscripción en latín "Franciscus". Sobre la tumba, una rosa blanca y en la pared, una reproducción de su cruz pectoral como símbolos de su legado de humildad y fe.

En las primeras horas, unas 20.000 personas desfilaron ante su tumba. Incluso antes de la apertura, más de 200 personas aguardaban para despedirse del pontífice argentino.

La Basílica de Santa María la Mayor tiene un profundo significado para Francisco: durante su papado, la visitó numerosas veces para orar frente a la Virgen Salus Populi Romani. Su elección de este templo como lugar de descanso final refleja su inmensa devoción mariana.

La enorme concurrencia en el primer día de visitas confirma el impacto universal de su figura. Se espera que en los próximos días, la basílica se convierta en un centro mundial de peregrinación y memoria.