Durante los últimos días un peculiar reclamo ganó lugar entre vecinos de la Ciudad de Buenos Aires con respecto al gusto del agua que sale de las canillas. Aysa tuvo que emitir un comunicado de prensa explicando a que se debe el mal olor y sabor que presenta el agua. Argumentaron que se debe “variaciones en el Río de la Plata”

Los usuarios del servicio comenzaron a quejarse porque el agua corriente había cambiado de sus características en los últimos días, dejó de ser inolora e insípida para tener un sabor que lo identificaban parecido al “aceite de Oliva”, mientras que otros directamente sostuvieron que tiene olor a “podrido”.
“Ante consultas puntuales de algunos usuarios de la concesión, sobre una modificación en el sabor y el olor del agua, informamos que de manera muy esporádica y excepcional pueden producirse variaciones en el Río de la Plata que provoquen esta situación, que de ninguna manera afectan la potabilidad del agua”,
sostuvieron desde Aysa con un breve comunicado para referirse al hecho puntual.
Y agregaron: “De esta manera, queremos llevar tranquilidad a nuestros usuarios informando que esta situación no presenta peligro alguno para la salud”.
De acuerdo al reclamo de los vecinos, la variación en el sabor se notó con mayor notoriedad en localidades de la zona norte de Buenos Aires.
Para dejar en claro que se actúa de manera correspondiente, desde Aysa aclararon que “el agua que suministramos es monitoreada las 24 horas, los 365 días del año y sometida a rigurosos análisis de laboratorio”. En este sentido aseguraron hay “un control permanente en todas las etapas de producción, desde la captación en el río hasta la distribución domiciliaria”.
Al finalizar dejaron abierta una vía de comunicación para poer evacuar dudas en el caso de que sea necesario. Los usuarios pueden comunciarse al número 0800-321-AGUA (2482) durante las 24 horas.