De acuerdo con lo informado por el secretario privado de Joseph Ratzinger, Georg Gänswein, a través de un comunicado de prensa, el papa Benedicto XVI asistió a una reunión en la que se habló de un sacerdote que había cometido abuso sexual contra menores en varias oportunidades.

Se trata de uno de los sacerdotes de los casos centrales del informe que el bufete de abogados Westphal Spilker Wastl presentó en nombre de la Arquidiócesis de Múnich y Freising, donde se acusa a Benedicto XVI de mala conducta en un total de cuatro casos
. El sacerdote mencionado acusado de abuso sexual contra menores fue luego trasladado a Baviera.
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Cabe recordar que, al momento de ratificar la declaración, Ratzinger remarcó que “esto no sucedió por mala fe, sino como resultado de un descuido en la edición de su testimonio“. En tanto, el secretario del papa emérito de 94 años agregó que “este error le duele mucho y se disculpa”.
Por otra parte, Gänswein aclaró también que, en aquella reunión llevada a cabo en enero del año 1980, “no se decidió acerca de una misión pastoral del sacerdote mencionado, sino que se accedió a la solicitud de darle alojamiento a este en Múnich durante el tratamiento psicológico al que se sometió“.

De acuerdo con el informe sobre los abusos contra menores realizado por la Arquidiócesis de Múnich y Freising, al menos 497 niños y niñas fueron abusados sexualmente entre los años 1945 y 2019 por parte de sacerdotes, diáconos y otros empleados eclesiásticos
. Según las investigaciones, hay al menos 235 presuntos perpetradores de dichos abusos sexuales, entre ellos, 173 sacerdotes y 9 diáconos.
Sin embargo, esa solo sería la “cifra visible”, y se estima que hay un número mucho mayor de casos de abuso no denunciados.