Barcelona se encuentra trastornado a raíz de las incógnitas que encubren al futuro de Lionel Messi. La institución de Cataluña se mantiene en vilo luego de la cumbre que mantuvieron el astro rosarino y el nuevo entrenador del equipo, Ronald Koeman. El holandés pretende que el argentino sea la pieza angular de su proyecto deportivo, pero la continuidad del futbolista habría adquirido más incertidumbres tras el cónclave de este jueves.
El jugador decidió interrumpir sus vacaciones familiares para conversar en persona con el técnico, quien rescindió su contrato con la selección de Holanda y reemplazó a Quique Setién en el banco del Culé. La reunión habría sido una petición del presidente de la entidad, Josep María Bartomeu, quien adelantó las elecciones para marzo de 2021 (eran en junio) a causa del clamor popular de los simpatizantes.
El delantero, de 33 años, estaba descansando en los Pirineos de Cataluña tras la eliminación frente a los Bávaros. El futbolista se trasladó con su esposa Antonela Roccuzzo y sus hijos Thiago, Mateo y Ciro. Además, habrían arribado al mismo destino turístico sus amigos y compañeros Luis Suárez y Jordi Alba. Sin embargo, el atacante abandonó la comodidad de la zona para analizar cuestiones claves para la reconstrucción que aborda el club.
Según el medio catalán RAC1, el ganador de seis Balones de Oro le habría asegurado al estratega neerlandés que aún no adoptó una resolución definitiva. Además, le confesó el malestar y disgusto que le generó la histórica derrota 8-2 del pasado sábado ante Bayern Munich por los cuartos de final de la Champions League, cuya final entre los Bávaros y Paris Saint Germain se llevará a cabo el próximo domingo 23 de agosto.
“Messi no ve claro su futuro en el Barça. El jugador le ha asegurado (a Koeman) que ahora mismo se ve más fuera que dentro del club, pero es consciente de las dificultades que tendrá para salir por sus condiciones contractuales”, revelaron desde el mencionado portal después de la cumbre que protagonizaron el capitán del Blaugrana y Koeman.
Y agregaron: “Messi le ha comunicado a Koeman sus intenciones de cara a la próxima temporada en una reunión que han hecho en la tarde de este jueves en el domicilio del jugador. Por ahora, en el club mantienen que el futbolista tiene contrato en vigor, que cuentan con él y que no quieren hacer ninguna valoración sobre el encuentro que han mantenido el entrenador y Messi”.
La debacle que padeció el conjunto catalán frente al Bayern habría sido la gota que colmó la paciencia de Messi, cuyo vínculo expira el 30 de junio de 2021. En este escenario, el diálogo que se desarrolló en Barcelona entre el futbolista y el entrenador adquirió un carácter primordial. Koeman buscó seducir a la Pulga con un proyecto ambicioso y una filosofía de juego donde el capitán sea la pieza clave del engranaje. Mientras tanto, Inter, Manchester City y PSG se mantienen expectantes.
