A partir de la jornada de hoy, Rusia comenzó con los ensayos clínicos de la vacuna que solo tendrá una dosis, destinada a frenar con mayor inmediatez a las nuevas pandemias y los altos índices de mortalidad provocados por el coronavirus. De acuerdo con la información brindada por el Centro Gamaleya, son 150 los voluntarios que participarán de estos análisis de la “Sputnik Light” en tres laboratorios de Moscú y San Petesburgo.

La diferencia con la Sputnik V que conocemos actualmente es que ésta requiere de dos dosis en un lapso de 21 días. Desde el Ministerio de Sanidad de Rusia autorizaron el comienzo de estas pruebas para conocer la seguridad y protección inmunológica de la vacuna, proceso que se extenderá por casi un año y terminará a finales de 2021. En tanto, Alexander Ginstburg, director del Gamaleya, indicó que la seguridad de la vacuna de una sola dosis está demostrada, pero su eficacia para su utilización entre los adultos mayores todavía tiene que ser analizada.

De esta manera, “Sputnik Light” servirá para reducir la mortalidad en situaciones en las que se es imposible inyectar las dos dosis necesarias para reforzar la inmunidad. “Y después de un tiempo ya se podrá recibir una segunda dosis. Nadie lo prohíbe y la Ciencia no está en contra”, precisó el especialista. En definitiva, el objetivo es maximizar el número de gente que tiene al menos inmunidad parcial contra el coronavirus, reduciendo potencialmente el número de casos graves y aliviando la carga a los sistemas de salud.
Las dos dosis de Sputnik son administradas usando virus inactivos diferentes, conocidos como vectores, y algunos fabricantes rusos han descubierto que la producción de la segunda es menos estable, lo que está generando un superávit del primer componente.