Un 28 de septiembre, pero del año 2010, Cris Morena y Gustavo Yankelevich recibían la peor noticia de sus vidas: su hija, Romina Yan, había fallecido de un paro cardíaco. Inmediatamente, la noticia conmocionó a todo el mundo de la televisión. Grandes y chicos, ajenos, familiares y allegados a la actriz de 36 años, se hundían en una profunda tristeza. “Ro, tu corazón late eternamente junto a nuestros corazones”, escribió su madre, recordándola a 10 años de su muerte. Lo hizo a través de un conmovedor video, publicado a través de su cuenta de Twitter.
“Vive Ro. Te amo tanto, hija”, concluyó la creadora de éxitos como Chiquititas, Rebelde Way, Floricienta, Casi Ángeles, y muchos más. En el video compartido aparecen distintas fotos de Romina junto a su mamá su padre, su hermano y sus tres hijos dentro de un corazón que simula latir. Y finaliza con una imagen que la actriz se tomó en una de las últimas producciones que realizó en televisión.
Ro, tu corazon late eternamente , junto a nuestros corazones VIVE RO.
— CRIS MORENA (@soycrismorena) September 28, 2020
Te amo tanto , hija? pic.twitter.com/hrE5cQ2sip
Durante el mes de agosto del año pasado, el hijo mayor de Romina, Franco Giordano, realizó una obra de teatro en la que homenajeó a su madre. Por supuesto, su abuela estuvo allí para acompañarlo y apoyarlo, y a la vez contó cómo fue la transición de la muerte de su hija: “Yo tuve que atravesarlo de una manera muy fuerte. No soy de tapar nada y lo atravesé como pude. Y eso es una manera de salvarme y sanarme”.

Un año antes, en agosto del 2018, Cris Morena había dicho durante una entrevista que el año anterior a la muerte de su hija ella previó que algo sucedería: “Yo estuve todo ese año muy mal y no tenía ningún motivo. Son esas cosas que te pasan en la vida que decís: ‘¿Por qué lloro todo el día?, ¿por qué todo me cuesta tanto?, ¿por qué estoy tan acongojada?’. Pensaba que estaba haciendo demasiadas cosas y con mucho estrés, con el tiempo me di cuenta que mi alma sabía«. Y agregó que “ese año hice dos viajes con ella sola, aproveché mucho. Y eso es porque el alma ya lo sabe y te va dando posibilidades de estar y de saldar cuentas de cosas que quedaron y poder hablarlas. Eso lo entendí después de mucho tiempo, empecé a mirar para atrás y entender”.