Durante la jornada de ayer, se aprobó en la Legislatura porteña la normativa que establece que las personas que arrojen colillas de cigarrillos a la vía pública en la Ciudad de Buenos Aires, serán multadas con hasta $15.000
. Esta iniciativa, que estuvo a cargo del diputado del GEN Sergio Abrevaya, se incorporó al Régimen de Faltas de la Ciudad, y la misma establecerá también la obligación de realizar trabajos comunitarios relacionados con la preservación del ambiente o concurrir a cursos especiales de educación y capacitación.

Asimismo, se establece que los “locales de baile, comercios donde se elaboren, fraccionen, sirvan y/o expendan alimentos y/o bebidas, shoppings, galerías, establecimientos de alojamiento y edificios de oficinas deberán implementar medidas destinadas a evitar que las colillas de cigarrillo se arrojen en el espacio público”. Lo mismo sucederá para quienes organicen eventos o actividades recreativas y comerciales en el espacio público. En tanto, esta nueva legislación determina que la Autoridad deberá implementar acciones y estrategias tendientes a informar, sensibilizar y/o concientizar en materia de impacto ambiental lo que ocasiona arrojar filtros y/o colillas de cigarrillos y/o cigarros en el espacio público.
Cabe mencionar que Abrevaya también es el autor de la ley que contempla la prohibición de fumar, arrojar colillas o restos de cigarrillos en patios de juegos, parques y plazas.

Desde la Asociación Civil Eco House realizaron un informe que en solo 2 horas recolectó 10.000 filtros en veredas y calles de cinco manzanas del microcentro porteño, demostrando el peligro que esto significa: Una sola colilla alcanza para contaminar hasta 60 litros de agua. Las colillas de los cigarrillos están compuestas por filtros de acetato de celulosa, un derivado del petróleo, que se utiliza para diluir y enfriar el humo inhalado por los fumadores y para atrapar parte del alquitrán que contienen los cigarrillos. Son la mayor causa de basura en el mundo y representan entre el 30 y 40% de todos los residuos recogidos cada año en la limpieza urbana y en la de las playas a escala internacional.
Según los cálculos de los especialistas, se desechan 4,5 trillones de colillas por año en todos los rincones del planeta. Además del importante dato de que las colillas arrojadas al suelo en áreas forestales, sin ser debidamente apagadas, son causantes de un gran número de incendios. Una de las principales responsables de la deforestación a nivel mundial es la industria tabacalera. Por año se talan dos millones de hectáreas de bosques para el uso de la madera en la producción del tabaco. Para ello, se usan 5 kilos y medio de madera para curar un kilo de hojas verdes de tabaco, para tornarlas marrones y que adquieran luego ese aroma tan característico.