Luego de haberse proclamado campeón con Argentinos Juniors, Claudio Borghi arribó a Boca en julio de 2010 con el objetivo de modificar la imagen de un equipo que había culminado en la 16° posición en el Torneo Clausura anterior, a 21 puntos del Bicho que conquistó el título y con solo siete unidades más que Chacarita y Atlético Tucumán, que finalizaron en las últimas posiciones del certamen.
La institución de La Ribera realizó inversiones en el mercado de pases para cumplir con los pedidos del nuevo entrenador y contrató a Clemente Rodríguez, Matías Caruzzo, Juan Manuel Insaurralde, Christian Cellay y Damián Escudero. Pese a las incorporaciones, el proyecto no brindó los frutos esperados.
Borghi y Riquelme coincidieron en Boca y Argentinos Juniors.
Luego de poco más de cuatro meses en el cargo, y tras haber caído 1-0 en el Superclásico con River en el Monumental, el técnico presentó su renuncia y terminó de manera prematura su ciclo. El Bichi no obtuvo los resultados deportivos que deseaba, aunque en las filas del Xeneize se destacaba Juan Román Riquelme.
El oriundo de Castelar reveló que le resultó difícil dirigir al actual vicepresidente segundo de Boca por un motivo especial. “Con Riquelme fue muy complejo porque era la primera vez que dirigía a un jugador que admiraba. Es difícil corregir a alguien que piensa más rápido que vos. Me sorprende todo lo que sabe”, reveló en diálogo con Salimos Jugando de Radio A La Calle.

El ex estratega de Colo Colo, Independiente y Liga de Quito, entre otros elencos, elogió las cualidades y resaltó la inteligencia del ex enganche, a quien también tuvo bajo sus órdenes en Argentinos Juniors en 2014. “Me hubiese gustado escucharlo a Román como comentarista. Nos da muchas enseñanzas, explica todo lo que ve dentro de la cancha de manera simple. Riquelme goza, pero los protagonistas son los jugadores. Es un tipo muy especial”, expresó.
Además, se deshizo en elogios para el mediocampista de Paris Saint Germain y la Selección Argentina, Leandro Paredes, a quien hizo debutar como profesional en Boca cuando el volante tenía 16 años: “Cuando lo vi a Paredes me enamoré. Cuando se fue a Europa dejó de ser creador para ser mediocampista mixto. No es ni marcador ni creador. A veces lo que necesitamos son formadores más que deformadores”.