Martín Guzmán, el ministro de Economía, señaló durante este martes que el proyecto de Presupuesto 2021 es “un paso fundamental en el proceso de estabilización de la economía”, en tanto subrayó la necesidad de “fortalecer las reservas internacionales”.

“El desafío del Gobierno es construir condiciones de estabilización para recuperar la economía con producción, empleo e inclusión social“, expresó tras presentar el plan económico para el próximo año en el marco de un plenario de la Cámara de Diputados.
El anuncio fue realizado en el Salón de los Pasos Perdidos, el cual se adaptó con 17 ubicaciones para los principales referentes de los bloques y las autoridades del cuerpo, mientras que el resto de los diputados intervinientes lo hicieron de manera remota.
También participó del encuentro el presidente de la Cámara, Sergio Massa, quien expresó que el proyecto en cuestión es “un fiel reflejo de las cuentas públicas de la Nación” y que es “una enorme posibilidad de demostrarle a la sociedad que se busca resolver los problemas del presente y los de mediano y largo plazo“.
Durante el inicio de su presentación, Guzmán señaló: “Estamos en una situación muy difícil en Argentina y en el mundo a causa de la pandemia coronavirus y el Presupuesto 2021 es otro paso fundamental en el proceso de estabilizar a la economía argentina y devolverla a un sendero de crecimiento inclusivo y estable“. Además añadió: “El Presupuesto 2021 es el ancla del esquema integral macroeconómico de transición entre el lugar en el que está hoy la economía Argentina y el lugar al que se quiere llegar“.
Asimismo, subrayó en varias oportunidades la necesidad de “fortalecer las reservas” internacionales en poder del Banco Central y enfatizó que “el esquema macroeconómico de transición está contenido en el proyecto de Presupuesto 2021 que tiene, justamente, a esta cuestión como ‘uno de sus objetivos’“.

“Estamos teniendo que lidiar con el proceso de especulación financiera de los procesos previos, con una política monetaria que favoreció el ingreso de capitales especulativos, que fuerza a la economía a defenderse“, indicó. En tanto completó: “Esto hace que Argentina hoy tenga que tener controles de capitales sustancialmente más extendidos que los que idealmente se quisieran tener para defender la economía de todas las presiones que enfrenta en el frente financiero“.
Con respecto al proyecto precisó que “apunta a un déficit fiscal primario del 4,5 por ciento del producto bruto interno“, algo que consideró como “un nivel adecuado en el contexto de las restricciones que enfrenta el país y para apuntar a una recuperación sostenible de la actividad económica y del empleo“.
Por último detalló: “Ese 4,5% del producto refleja lo que es la visión del Gobierno, no solo en lo macroeconómico, sino en relación a cinco objetivos: inclusión, dinámica productiva, estabilidad macro, federalismo y soberanía“.