Federico Rivero trabajaba como chofer de la línea 312 de la empresa “La Perlita“. Fue asesinado de un balazo al resistirse ante los delincuentes que quisieron robarle su camioneta. El hecho ocurrió en el cruce de las calles Sucre y Esquiú, en el barrio La Blanquita, de Merlo.
“Lo acribillaron en su camioneta y a la vista de su señora“, contó Pablo Fernández, delegado de la línea 312 donde la víctima trabajaba desde hace más de 15 años. Según se pudo saber, Rivero estaba esperando que su esposa volviera de hacer unas compras cuando fue atacado. Quiso evitar que le secuestraran su vehículo pero en el forcejeo recibió un disparo en un pulmón, y falleció poco después de ser intervenido quirúrgicamente en el hospital Eva Perón.
La víctima tenía 40 años y era una persona muy querida por todos sus compañeros de trabajo. “Estamos todos destruidos“, se lamentó Fernández. Debido a esto, los delegados de la empresa de colectivos reclamaron mayor seguridad ya que “los únicos que estamos expuestos somos los que salimos a laburar todos los días“.
