28/10/2024
La decisión se oficializó mediante un decreto en el Boletín Oficial. Se trata de Francisco Tropepi, quien sucederá en el cargo a Ricardo Lagorio, alguien muy resistido por la Casa Rosada.
El Gobierno designó a Francisco Tropepi como el nuevo representante permanente de Argentina ante las Naciones Unidas, de acuerdo con lo establecido en el Decreto 957/2024 publicado en el Boletín Oficial. Tropepi, quien hasta ahora había estado en Washington bajo el embajador Gerardo Werthein, asume el cargo con el rango de "Embajador Extraordinario y Plenipotenciario". La decisión fue firmada por el presidente Javier Milei y la canciller Diana Mondino.
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El decreto también establece la salida de Ricardo Lagorio, quien será trasladado desde la Representación Permanente ante la ONU al Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto. Este cambio responde a tensiones internas en el ámbito diplomático argentino, ya que, según fuentes de la Cancillería, la decisión busca alinear la representación del país con la visión del presidente Milei, expresada en la reciente Asamblea General de Naciones Unidas.
Durante su discurso en la Asamblea, Milei criticó abiertamente a organismos internacionales y cuestionó los acuerdos de la Agenda 2030, que denominó "Pacto por el Futuro". El presidente ha manifestado su intención de convertir a Argentina en un "faro del mundo" en términos de libre mercado y posturas conservadoras en lo social y político.
La decisión se oficializó mediante un decreto en el Boletín Oficial. Se trata de Francisco Tropepi, quien sucederá en el cargo a Ricardo Lagorio, alguien muy resistido por la Casa Rosada.
El entorno cercano a Milei, compuesto por su hermana Karina Milei y su asesor Santiago Caputo, conocidos como el "triángulo de hierro", ha estado impulsando reformas tanto en la forma como en el fondo de la diplomacia nacional. Una fuente libertaria expresó que "algunos de adentro son la expresión más rancia de la casta", reflejando la insatisfacción con ciertos enfoques diplomáticos previos.
La disconformidad con el desempeño de Lagorio fue evidente, ya que se consideraba que no representaba adecuadamente la ideología del gobierno. Las restricciones impuestas a Lagorio, que incluyeron su exclusión de eventos clave durante la visita de Milei a Nueva York en septiembre, evidencian las tensiones existentes.
En el ámbito geopolítico, Milei ha calificado la Agenda 2030 como un reflejo de la influencia del Estado en la cultura, según el concepto de Antonio Gramsci. El mandatario considera que el "Pacto del Futuro" representa una amenaza para los intereses argentinos al promover una agenda global que incluye temas como la paz y el cambio climático.
Lagorio, en contraste, había promovido una postura más neutral, sugiriendo una abstención en votaciones sobre Palestina como medio para alinear a Argentina con Israel sin confrontar a otros actores. Sin embargo, esta perspectiva no fue bien recibida en la Casa Rosada, lo que contribuyó a su reemplazo.
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Con la salida de Lagorio y la llegada de Tropepi, el gobierno busca reforzar una representación diplomática que refleje sus principios ideológicos de manera más estricta. En un contexto donde también se ha reportado la renuncia de Leopoldo Sahores, segundo de Mondino, y su reemplazo por Eduardo Bustamante, la reestructuración del equipo diplomático argentino continúa en marcha.
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