21/12/2024
La adolescente de 17 años fue reportada como desaparecida el 26 de noviembre. La madre de Candela la reconoció por una media encontrada en el lugar. Los acusados son su primo Carlos Ayoza y Alan Vega, vecino de los prófugos, ambos detenidos.
BONA DATA
La justicia confirmó que los restos humanos encontrados en las vías del Ferrocarril Roca corresponden a Candela Ayoza, una adolescente de 17 años que fue asesinada, calcinada y abandonada en la zona de Villa Albertina, Lomas de Zamora. Tras más de 20 días de incertidumbre, el ADN de los restos calcinados permitió establecer la identidad de la joven, que había sido reportada como desaparecida el 26 de noviembre, un día antes de que se hallaran sus restos.
El reconocimiento preliminar de la madre de Candela, quien identificó parte de la ropa encontrada cerca de los restos, permitió avanzar en la investigación. Sin embargo, los análisis de ADN fueron cruciales para confirmar sin lugar a dudas que los restos pertenecen a la joven. El fiscal José Luis Juárez, a cargo de la investigación, anunció que pedirá la prisión preventiva para los dos imputados: Carlos Ayoza, primo de la víctima, y Alan Vega, un vecino de los prófugos.
A pesar de que no había dudas sobre la identidad de los restos, el fiscal solicitó las pruebas de ADN para reforzar el caso. Las pruebas confirmaron que las partes mutiladas encontradas en las vías del tren son compatibles con el perfil genético de Candela.
Carlos Ayoza fue detenido como el principal sospechoso tras ser señalado por la familia como la última persona que vio a Candela con vida. Según su relato, el 26 de noviembre, ella lo acompañó para comprar unas zapatillas y luego se dirigieron a la casa de los prófugos, donde ella permaneció esperando a una persona. Sin embargo, Ayoza afirmó que se fue de la casa cuando ella no regresó. 'Mi prima se quedó en la casa. Ella estaba viva', aseguró. A pesar de su versión, el relato no modificó su situación procesal y sigue siendo considerado un sospechoso clave.
Por otro lado, Alan Vega es considerado el principal implicado por la justicia. Se tienen pruebas que lo vinculan directamente al crimen, incluido un video en el que se le ve junto a los prófugos mientras trasladaban el cadáver de Candela.
Los restos calcinados fueron encontrados el 30 de noviembre, a orillas de las vías del tren Roca, entre las estaciones de Temperley y Haedo. La Policía Científica de la Bonaerense realizó un rastrillaje en la zona, encontrando a 300 metros del primer hallazgo otros fragmentos humanos, como una cabeza y huesos, todos quemados. Sin embargo, el torso de la víctima nunca apareció, lo que complica aún más la investigación.
El crimen ocurrió, según los investigadores, pocas horas después de que Candela desapareciera. La joven habría sido asesinada en una zona conocida por la venta de drogas, donde se había dirigido junto a su primo y los prófugos. Los investigadores sostienen que el cuerpo fue calcinado con nafta y luego transportado en bolsas de arpillera, utilizando un carro que le pidieron a un vecino.
El caso fue caratulado como homicidio triplemente agravado por la violencia de género, por la participación de tres personas y por el ensañamiento.
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