28/11/2024
La ex mandataria y toda su lista desembarcarían en la conducción partidaria en las próximas semanas.
Si todo sigue según lo planeado y no surgen contratiempos, Cristina Kirchner asumirá la presidencia del Partido Justicialista (PJ) Nacional antes de que finalice el año. Además, lo harán los cinco vicepresidentes y los 31 consejeros que integran la lista de "Primero La Patria", que apoyó a la ex presidenta.
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En las últimas semanas, varios consejeros presentaron sus renuncias al cargo, facilitando el recambio de autoridades. La salida definitiva de Alberto Fernández de la conducción del partido se concretó el 14 de agosto, tras una serie de escándalos judiciales que culminaron con su imputación por violencia de género. Desde ese momento, el PJ Nacional quedó sin presidente formalmente, y fue gestionado de manera provisional por los cinco vicepresidentes designados.
A pesar de los esfuerzos por darle un nuevo impulso al partido bajo esta estructura, la dinámica no prosperó. La ex presidenta, quien quedó como la única candidata viable para asumir la conducción, ha decidido avanzar con la formalización de su llegada a la presidencia del PJ, sin demoras innecesarias. Esta medida parece ser una simple formalidad que allanará el camino para la reorganización interna del partido en torno a su figura.
La ex mandataria y toda su lista desembarcarían en la conducción partidaria en las próximas semanas.
La confirmación de Cristina Kirchner como presidenta del PJ llegó luego de un fallo judicial que bloqueó la lista de Ricardo Quintela, quien había intentado competir con la ex jefa de Estado. La junta electoral del partido y la justicia federal consideraron que su lista contenía irregularidades insalvables.
El mandato de los actuales vicepresidentes y consejeros vence en marzo del próximo año, pero el consenso dentro del peronismo es claro: no tiene sentido esperar tres meses más cuando la autoridad ya está concentrada en Cristina Kirchner. El adelanto de su asunción permitiría a la ex presidenta activar la vida partidaria de inmediato, comenzar a convocar nuevas mesas políticas y acercar a diferentes sectores del peronismo, incluidos los sindicatos y actores sociales.
Este adelantamiento también es clave para que Cristina Kirchner pueda influir en las elecciones de medio término que se llevarán a cabo en varias provincias, donde las listas se cerrarán entre febrero y abril. Como presidenta del PJ, la ex mandataria tiene la intención de ser una pieza central en la estrategia electoral del partido.
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En las próximas dos semanas se espera que se definan las fechas para la asunción oficial. Para ello, será necesario que todas las autoridades actuales presenten sus renuncias. En ese proceso se encuentra involucrado Juan Manuel Olmos, uno de los apoderados del partido.
A pesar de las tensiones internas que persisten dentro del peronismo, hay un acuerdo generalizado sobre la necesidad de que Cristina Kirchner asuma cuanto antes para reactivar al partido. Esto permitiría además abrir un espacio de diálogo con los diferentes sectores, que podrían encontrar en el PJ un nuevo punto de encuentro y una plataforma para el desarrollo de un nuevo programa político y económico. La discusión interna entre el kirchnerismo y el peronismo del interior, sin embargo, podría generar fricciones y retos a superar, complicando la unidad del partido a medida que avanzan las negociaciones.
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