El Banco Central decidió mantener la tasa de interés en 40%

El Banco Central (BCRA) de Argentina optó por mantener la tasa de interés en un 40% nominal anual (TNA), a pesar de las expectativas previas que sugerían la posibilidad de un ajuste al alza. Esta medida se enmarca en el inicio de una nueva fase del plan económico del país, que incluye la migración de su deuda hacia el Tesoro mediante las nuevas Letras Fiscales de Liquidez (Lefi). Cabe recordar que la última modificación en la tasa de política monetaria fue el pasado 14 de mayo, cuando el BCRA redujo la tasa de interés de 50% a 40%. Desde entonces, ha avanzado en implementar nuevas estrategias, siendo una de las principales la intervención en la brecha cambiaria.

El objetivo principal de estas acciones, según analistas financieros, es estabilizar el mercado cambiario. Una de las medidas clave ha sido la recompra de pesos emitidos para capturar divisas en el segmento oficial, lo cual, aunque desacelera la acumulación de reservas internacionales, es crucial para cumplir con las condiciones necesarias para levantar las restricciones cambiarias vigentes.

Asimismo, el Presidente Javier Milei, figura prominente en el debate económico argentino, remarcó la importancia de eliminar los pasivos remunerados del BCRA como paso esencial para liberar las restricciones al dólar. Estos pasivos obligaban al BCRA a imprimir pesos para pagar los intereses cuando vencían los pases.

El diagnóstico oficial atribuye la alta inflación y la brecha cambiaria al exceso de pesos en circulación, motivo por el cual el gobierno ha puesto en marcha un plan de "emisión cero". Además de la eliminación de la deuda del BCRA, se han implementado otras medidas, como la reciente recompra de pólizas a los bancos para limitar la emisión monetaria derivada de seguros sobre títulos públicos.

Otra medida clave anunciada recientemente es una nueva política de acumulación de reservas, que apunta a evitar la inyección de pesos al sistema cuando el BCRA compra dólares de exportadores. En este sentido, desde la semana pasada, el BCRA recompra cada peso emitido como resultado de estas operaciones en el mercado financiero, asegurándose de retener una parte significativa de las divisas adquiridas. Con estas acciones, el gobierno argentino busca cerrar las principales vías de emisión monetaria, al tiempo que administra la acumulación de reservas de manera más sostenible en el contexto económico actual.