El Gobierno evalúa demoler el edificio del ex Ministerio de Desarrollo Social en la 9 de Julio

El Gobierno nacional está considerando la demolición del edificio que alberga actualmente el Ministerio de Capital Humano, ubicado en plena Avenida 9 de Julio y que, desde 2011, exhibe dos imágenes de María Eva Duarte de Perón. La posibilidad de esta medida fue revelada por un funcionario cercano a la gestión de Javier Milei durante una conversación con periodistas en la Casa Rosada.

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El anuncio surge poco después de la decisión de cambiar oficialmente el nombre del Centro Cultural Kirchner, lo que refleja un cambio de enfoque en la administración actual hacia las obras y símbolos del pasado. Aunque la demolición del edificio no se prevé en el corto plazo, el funcionario indicó que la propuesta está en carpeta y podría concretarse en el futuro, tal vez en julio del próximo año.

"No es algo contra el peronismo, es para abrir el tránsito de la 9 de Julio", argumentó un importante funcionario libertario.

"Es un edificio federal, la Ciudad no tiene injerencia", aclaró el dirigente libertario, enfatizando que la intención de demoler no es un ataque al peronismo, sino una medida destinada a mejorar el flujo del tránsito en una de las principales arterias de la Ciudad de Buenos Aires. "No será ahora, tal vez en julio del año que viene", agregó.

Al ser consultado sobre la coincidencia de este anuncio con la conmemoración del Día de la Lealtad Peronista, el funcionario minimizó las implicancias políticas, afirmando: "No es que queremos invisibilizar al peronismo". En un giro provocador, añadió: "Igual el nuevo peronismo somos nosotros, el partido que representa a los trabajadores. El peronismo del que hablan ustedes hoy representa a los planeros".

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La posible demolición ha suscitado reacciones variadas, dado que el edificio, que originalmente albergó el Ministerio de Obras Públicas y el Ministerio de Salud, no solo tiene un valor arquitectónico, sino que también está cargado de simbolismo político. La discusión sobre su futuro se inscribe en un contexto más amplio de cambios en la narrativa oficial del gobierno de Milei respecto a la historia y la cultura argentinas.