El gobierno oficializó las postulaciones de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para la Corte Suprema

Ante el puesto actualmente vacante en la Corte Suprema y el retiro próximo del magistrado Juan Carlos Maqueda, el presidente Javier Milei oficializó este miércoles las nominaciones de los jueces Ariel Lijo y Manuel José García Mansilla para integrar el máximo tribunal del país, al tiempo que instruyó a que comience el procedimiento pertinente para su eventual nombramiento, en un documento que ya fue remitido al ministro de Justicia Mariano Cúneo Libarona.

"Tengo el agrado de dirigirme a usted con el objeto de informarle que el señor Presidente de la Nación firmó la Instrucción Presidencial (IPRES-2024-1-APN-PTE), que se adjunta embebida a la presente, por la cual se lo instruye para que, en su carácter de Autoridad de Aplicación del Decreto N°222/03 y sus modificatorios, inicie el pertinente procedimiento para cubrir las vacantes en la Corte Suprema de Justicia de la Nación con los doctores Ariel Oscar Lijo y Manuel José García Mansilla", indica la misiva rubricada por el Director General de Despacho y Decretos Raúl Alberto Cachaldora.

De esta manera se dio inicio formal al recorrido para el posible nombramiento de los dos magistrados en el tribunal hoy presidido por Horacio Rosatti, tal como lo había informado hace una semana el gobierno nacional. La intención de la administración de La Libertad Avanza es designar a Lijo en el puesto que dejó vacante a fines de 2021 la jueza Elena Highton de Nolasco. En tanto, García Mansilla ocuparía el lugar de Juan Carlos Maqueda, quien en diciembre alcanzará los 75 años, edad prevista para el retiro de los ministros. Los dos nuevos integrantes se unirían además a Ricardo Lorenzetti y Carlos Rosenkrantz.

El procedimiento contempla, luego de las nominaciones del Ejecutivo y del avance formal de la presentación a través del Poder Judicial, el análisis de los pliegos por parte del parlamento después del correspondiente tratamiento en comisiones, en un camino que se demoraría varios meses. Las distintas etapas también incluyen la participación de la ciudadanía a través de referentes y agrupaciones. La definición, en tanto, recaerá en el Senado, que deberá expresarse acerca de las nominaciones y solo podrá aprobarlas con el voto favorable de dos tercios de los miembros presentes en la Cámara Alta.