Guillermo Francos presenta informe de gestión en el Senado y asegura análisis de reforma tributaria integral

En un contexto de alta tensión legislativa, con la última semana de sesiones ordinarias del Congreso en pleno desarrollo, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, acudirá este miércoles al Senado para rendir su primer informe de gestión ante los legisladores. La presencia del funcionario se enmarca en el cumplimiento del artículo 101 de la Constitución Nacional, que establece que el jefe de Gabinete debe comparecer al Congreso al menos una vez al mes. Desde su designación en el cargo, Francos solo había comparecido en una ocasión ante la Cámara de Diputados.

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Durante su informe, Francos brindó más de 1000 respuestas a las consultas de los legisladores, destacándose un tema clave: la reforma tributaria. Ante una pregunta sobre la eliminación del impuesto PAIS, que tiene vigencia hasta el 23 de diciembre de 2024, el jefe de Gabinete aseguró que el gobierno está trabajando en un "proyecto integral de reforma impositiva que incluirá todos los tributos". Esta afirmación fue reforzada en otro pasaje del extenso informe, donde se abordó la continuidad del impuesto al cheque, que permanecerá vigente hasta 2027. En este caso, Francos explicó que dentro del marco de la reforma tributaria, el Ejecutivo busca consolidar el "sendero fiscal iniciado con la Ley 27.743", con el objetivo de "atenuar la incidencia de impuestos distorsivos".

En relación con el decreto de necesidad y urgencia (DNU) 846/24, que permite la renegociación de la deuda pública, Francos precisó que este no modifica las condiciones de emisión de títulos de deuda ni elimina disposiciones de la Ley 24.156, sino que facilita la emisión de nuevos títulos mediante la suscripción de instrumentos ya existentes. La medida ha generado polémica, y sectores de la oposición han propuesto modificar el mecanismo de validación de los DNU en el Congreso. Sobre este punto, el jefe de Gabinete se mostró crítico, argumentando que estas iniciativas carecen de "justificación histórica" y responden a "intenciones políticas" que buscan obstaculizar el accionar del gobierno, que actualmente posee una minoría en ambas cámaras.

Así lo aseguró ante la consulta de un senador el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien dará un informe de gestión el miércoles en el Congreso. Asistirá por primera vez a la Cámara alta.

En el marco del ajuste fiscal, Francos destacó que la Casa Rosada ha priorizado recortes dentro del sistema político, no sobre el sector privado ni sobre la ciudadanía en general. En este sentido, el gobierno ha logrado reducir significativamente la cantidad de empleados públicos: 31.226 agentes menos en comparación con el inicio de la gestión. A nivel económico, el jefe de Gabinete subrayó la necesidad de lograr un superávit fiscal para controlar la emisión monetaria y frenar la inflación, que en 2023 alcanzó el 211%. Francos también mencionó que, en el contexto de la política económica, se han tomado decisiones clave como la eliminación de restricciones a las importaciones, lo que ha permitido un comercio exterior más "genuino" y menos especulativo.

En cuanto a los sectores más vulnerables, el gobierno sigue adelante con el pago de pensiones no contributivas y la Asignación Universal por Hijo (AUH), que en septiembre de 2024 benefició a más de 4,1 millones de personas. Además, el Ejecutivo continúa con la moratoria previsional, que se extenderá hasta marzo de 2025.

Uno de los puntos más discutidos en el informe de Francos fue la situación de las pequeñas y medianas empresas (PYMES), que han experimentado una reducción del 5% en su cantidad entre 2007 y 2023. La crisis económica ha sido un factor clave en la pérdida de empresas exportadoras, y el funcionario señaló que la actividad industrial ha caído un 10% en este período.

En cuanto al turismo, el gobierno ha optado por reducir el gasto en el programa "Previaje", una medida que podría haber implicado un costo fiscal de alrededor de 144 mil millones de pesos, en un contexto de ajuste económico.

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La comparecencia de Francos al Senado tiene lugar en una de las semanas más caóticas del año en el Congreso, con una agenda cargada de proyectos de ley y debates pendientes. Con el cierre del año legislativo a la vuelta de la esquina, el funcionario tendrá que enfrentar no solo las preguntas sobre la reforma tributaria, sino también la creciente presión de la oposición y las demandas de sectores que buscan una revisión de las políticas económicas del gobierno.

A medida que el Ejecutivo avanza en su ajuste fiscal y sus reformas estructurales, el rol del Senado como espacio de control y discusión se perfila como crucial para definir los próximos pasos en la gestión del presidente Javier Milei. Sin embargo, la falta de consenso y la constante confrontación con la oposición aseguran que, incluso con el informe de Francos, las aguas seguirán moviéndose intensamente en el Congreso.