Javier Milei se perdió la despedida del Papa por un acto con dirigentes liberales

El acto liberal en la Eseade que retrasó a Milei

Javier Milei no logró entrar a la Basílica de San Pedro para la misa de despedida del Papa Francisco. El Presidente argentino llegó tarde al Vaticano tras asistir a un acto libertario en la Escuela Superior de Economía y Administración de Empresas (Eseade), lo que le impidió participar de uno de los momentos más simbólicos de su gira europea.

El acto se realizó la tardenoche del jueves en esa institución fundada en 1978 por Alberto Benegas Lynch (padre), una figura emblemática del liberalismo argentino.

Allí, Milei compartió espacio con su hijo, el diputado Alberto "Bertie" Benegas Lynch, y el economista español Jesús Huerta de Soto, a quien considera "uno de sus héroes", al menos por ahora.

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Una ceremonia extensa y un homenaje a los referentes liberales

Durante su discurso, que se extendió por más de 40 minutos, Milei elogió a sus anfitriones y se refirió al fundador de la Eseade como un "prócer liberal". Vestido con la toga ceremonial con los colores rojo y negro -símbolo académico del instituto-, el mandatario protagonizó un acto cargado de ideología y respaldo simbólico al pensamiento anarcocapitalista.

Aunque su equipo había previsto viajar desde Buenos Aires a Roma para sumarse al velorio del Papa Francisco, la prolongación del evento liberal desacomodó los tiempos. El avión presidencial aterrizó ya entrada la mañana romana, cuando la Basílica de San Pedro se encontraba colmada y las puertas cerradas.

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Ceremonia. Varios líderes mundiales participaron del último adiós al Papa Francisco en el Vaticano.

Milei llegó tarde al Vaticano y no pudo entrar a la Basílica

El acceso al templo vaticano estuvo limitado durante la jornada a delegaciones oficiales, líderes internacionales y los cerca de 250 mil fieles que desde temprano se acercaron a dar el último adiós al pontífice argentino. Entre quienes sí lograron ingresar a tiempo se contaron los presidentes Emmanuel Macron (Francia) y Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil).

A diferencia de ellos, Milei se vio obligado a presenciar la ceremonia desde el exterior, tras haber llegado al lugar cuando ya había concluido el ingreso de autoridades. Esta situación provocó desconcierto en parte de su comitiva y generó críticas en redes sociales por la prioridad dada al acto académico en Buenos Aires.

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El Presidente prioriza sus vínculos con el pensamiento liberal

A pesar del traspié diplomático, desde el entorno presidencial confirmaron que Milei recibirá a Huerta de Soto en la Casa Rosada una vez finalizada la gira, reforzando así su cercanía con los pensadores que inspiran su gestión.

Aunque la intención de participar del velorio estaba presente, el episodio reflejó una vez más el peso simbólico y estratégico que Milei le otorga a su alineamiento con el liberalismo más ortodoxo, incluso en contextos que involucran relaciones internacionales y diplomacia papal.