La oposición buscará negociar ley por ley con el oficialismo en Diputados

Con la llegada del segundo semestre, el oficialismo enfrenta un panorama político más complejo en el Congreso de la Nación. Después de un primer semestre en el que los bloques "dialoguistas" apoyaron mayormente al Gobierno, las condiciones para negociar proyectos de ley se han vuelto más complicadas, poniendo a prueba la capacidad de La Libertad Avanza para implementar su agenda legislativa.

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Cabe mencionar que el apoyo que el oficialismo recibió en los primeros seis meses de parte de bloques como la UCR y Hacemos Coalición Federal está comenzando a desmoronarse. Los errores de la gestión y los desacuerdos internos han erosionado la confianza y enfriado las relaciones con aliados clave. El impacto de estas fricciones se hará más evidente en la negociación de proyectos de ley que el Gobierno planea enviar al Congreso en los próximos meses.

Uno de los principales reclamos proviene de un diputado que, tras el tratamiento de la Ley Bases, cuestionando al oficialismo por no respetar los acuerdos, señalando que "esto erosiona la confianza y cambia los humores". Las tensiones se intensificaron cuando el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, negó acuerdos previos con la UCR y el bloque de Hacemos Coalición Federal, lo que generó malestar entre los aliados. Miguel Ángel Pichetto, ex senador y figura destacada del PRO, resumió la situación con una contundente analogía: "Si le pegás todos los días a un perro con un palo, cuando lo vayas a acariciar, te va a morder".

El malestar entre los aliados también se ha reflejado en las declaraciones de otros líderes opositores. Nicolás Massot expresó su descontento con las políticas del Gobierno, cuestionando las prioridades y el manejo de recursos, mientras que Cristian Ritondo, presidente del bloque del PRO, planteó preocupaciones sobre la falta de acuerdos institucionales y posibles investigaciones legislativas.

Asimismo, el PRO se prepara para intensificar su rol en el debate político. Este jueves, el partido llevará a cabo un gran acto con la reaparición de Mauricio Macri, en un intento por recuperar identidad y prepararse para las negociaciones de cara a las elecciones de medio término del próximo año. Por su parte, la UCR está dividida entre los sectores que responden a Martín Lousteau, Facundo Manes y Rodrigo De Loredo. Lousteau, en particular, está siendo observado por su cercanía con Santiago Caputo y su posible candidatura para el año que viene. De Loredo, por otro lado, aboga por una estrategia más unificada en las votaciones, que podría comenzar a vislumbrarse en el debate sobre el régimen penal juvenil.

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El inicio del trabajo en las comisiones y la sesión convocada para el 7 de agosto serán los primeros indicios de cómo se desarrollará esta nueva etapa en el Congreso. El oficialismo deberá navegar en un terreno más complicado, donde la capacidad de negociar y construir consensos será puesta a prueba en un entorno legislativo más hostil.