Los laboristas logran un aplastante triunfo en Reino Unido y regresan al poder tras 14 años

Keir Starmer se perfila como el próximo primer ministro del Reino Unido, con el Partido Laborista obteniendo una mayoría significativa en las elecciones parlamentarias, según una encuesta realizada el jueves. Mientras tanto, los conservadores liderados por Rishi Sunak enfrentarían pérdidas históricas.

El sondeo indica que los laboristas conseguirían 410 de los 650 escaños del Parlamento, poniendo fin a 14 años de dominio conservador.

Este resultado proporcionaría a los laboristas una mayoría de 170 escaños, terminando así con el prolongado y cada vez más tumultuoso gobierno conservador.

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Según la encuesta, el partido de Sunak solo lograría 131 escaños, el peor desempeño electoral en su historia, con los votantes castigando a los conservadores por la crisis del costo de vida y años de inestabilidad y conflictos internos que han resultado en cinco primeros ministros desde 2016.

Los liberaldemócratas de centro obtendrían 61 escaños, mientras que Reform UK, liderado por el activista del Brexit Nigel Farage, conseguiría 13.

La predicción para Reform UK fue sorprendentemente buena, ubicando al partido cómodamente en segundo lugar detrás de los laboristas en los primeros dos escaños en declarar sus resultados, relegando a los conservadores al tercer lugar.

Derrotado. El primer ministro británico, Rishi Sunak, sufrió una abultada derrota y su estadía en Downing Street llegará a su fin.

Sunak sorprendió a Westminster y a muchos dentro de su propio partido al convocar elecciones antes de lo necesario en mayo, cuando los conservadores estaban 20 puntos porcentuales por detrás de los laboristas en las encuestas de opinión.

Los conservadores esperaban reducir la diferencia, como suele suceder en las elecciones británicas, pero una campaña desastrosa no les favoreció.

El proceso comenzó mal para Sunak, quien se empapó bajo la lluvia fuera de Downing Street al anunciar las elecciones, antes de que asesores y candidatos conservadores se vieran envueltos en un escándalo de apuestas sospechosas sobre la fecha de las elecciones.

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Si la encuesta a pie de urna resulta precisa, esto representaría un giro notable para el Partido Laborista, que, hace solo tres años, parecía estar en crisis tras su derrota en 2019.

Sin embargo, una serie de escándalos, especialmente las revelaciones sobre fiestas en Downing Street durante el confinamiento por COVID, socavaron al entonces primer ministro Boris Johnson. Para noviembre de 2021, la ventaja de los conservadores en las encuestas había desaparecido, después de haber sido más alta incluso que durante el gobierno de Margaret Thatcher.