Represión y detenciones afuera del Congreso tras la aprobación de la Ley Ómnibus

Represión de la Policía y detenciones a los manifestantes tiñeron de violencia el tercer día de movilización en las afueras del Congreso de la Nación, donde esta tarde obtuvo media sanción en general la "Ley Ómnibus" impulsada por el gobierno de Javier Milei, en el marco del "protocolo antipiquetes" promovido por la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, luego del fuerte operativo de represión desplegado por las fuerzas ayer por la noche.

Una jornada de protesta que había transcurrido en términos pacíficos durante gran parte del día derivó en hechos de violencia al caer la noche luego de que la Cámara de Diputados aprobara por 144 votos a 109 el dictamen en general de la "Ley de Bases" oficialista pasadas las 18. Ante ello, una convocatoria que había sido inicialmente protagonizada por agrupaciones artísticas y culturales se combinó con el influjo de nuevos manifestantes que acudieron a la zona en repudio de la media sanción del parlamento.

En ese contexto, y según los lineamientos del "protocolo antipiquetes" de Bullrich, agentes de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) avanzaron sobre los manifestantes con el fin de arrinconarlos contra la vereda y evitar que corten las calles lindantes a la Plaza de los Dos Congresos en lo que fue el primer episodio de disturbios de la tarde. Los uniformados empujaron a los presentes, tanto autoconvocados como trabajadores de prensa, con escudos y gases lacrimógenos, al igual que lo hicieron durante los últimos dos días de actividad legislativa y movilización.

Posteriormente arribaron a escena numerosos efectivos motorizados y acompañados por un camión hidrante que se subió a la plaza. Los policías se ubicaron formando un cordón contra la vereda y de cara a los manifestantes, que esta vez se ubicaban sobre la plaza y, por lo tanto, no cortaban ninguna vía de circulación. Se trata de los mismos agentes que ayer por la noche atacaron a manifestantes y periodistas por igual con palazos, gases lacrimógenos y balazos de goma de forma indiscriminada.

Al caer la noche y después de que un grupo de manifestantes prendiera fuego un contenedor en la calle, la Policía comenzó a disparar con balas de goma a los manifestantes presentes tanto en la calle como en la vereda con el fin de disuadirlos, al igual que ocurrió este jueves. Las motocicletas continuaron girando en círculos alrededor de la Plaza, mientras la Prefectura y la Federal permanecieron en la calle. Finalmente, las fuerzas detuvieron a al menos dos personas, una de las cuales aparentemente portaba una cámara fotográfica.