El niño se llamaba Santiago Furlotti Núñez, quien fue ingresado el pasado domingo al Hospital Guillermo Rawson de San Juan y le diagnosticaron “muerte cerebral”. El martes los médicos reconocieron que ya no podían hacer nada para salvar la vida del menor.
La familia había ido a pasar el domingo al camping “Foro de Abogados” donde a las 17:30 horas, el chico mientras jugaba, se cayó en la pileta la cual tenía 1,20 metros de profundidad.
El bañero se metió a rescatar al niño y cuando lo sacó del agua, se estima que llevaba entra 30 y 40 segundos sumergido, lo que afectó mucho a su sistema respiratorio.
Desde el personal médico del camping le hicieron técnicas de reanimación aunque sin éxito. Cuando llegó al hospital, un shock eléctrico logró reanimarlo pero el servicio de salud se percató que Santiago tenía un fuerte daño cerebral.
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Una vez que lograron estabilizarlo, se le aplicó una tomografía computarizada, en la que se pudo apreciar que la actividad cerebral del pequeño era nula.
Los padres en una carta despidieron a su hijo: “Su corazón seguirá latiendo en otro niño, sus ojos seguirán viendo del mundo lo que no pudo ver (…). En un mundo lleno de odio y mezquindad, Santiago nos da un ejemplo de valor y amor”. Por otro lado, agregaron que habilitarán la intervención de la INCUCAI para donar sus órganos.
