19/01/2025
El Gobierno colombiano envío al menos 300 efectivos militares para contener la ola de violencia en el noreste del país.
La Defensoría del Pueblo de Colombia informó que, aproximadamente 60 personas perdieron la vida en enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y una disidencia de las FARC en varios municipios de la región del Catatumbo, en el noroeste de Colombia.
La situación ha generado 'confinamientos' en estas áreas, lo que ha obligado a algunas personas a dejar la zona en 'caravanas' terrestres, motorizadas o fluviales para buscar refugio en otros lugares, agravando la situación de los desplazados a causa de la violencia.
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Ambas organizaciones se disputan territorio clave para actividades vinculadas al narcotráfico.
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En su mayoría, los desplazados son ciudadanos colombianos, aunque también civiles venezolanos se ven afectados por esta situación, en muchos de los casos son familias colombo-venezolanas las que buscan refugio en Venezuela para huir de la violencia.
La Defensoría agregó que la violencia y sus efectos han empezado a causar escasez de alimentos, por lo que llamó tanto a los gobiernos nacional y locales como a los grupos armados a garantizar el acceso de atención humanitaria para la población afectada, en particular, menores de edad, adultos mayores, mujeres gestantes y personas con discapacidad.
La guerra del ELN contra las disidencias de las FARC por el control territorial, que comenzó el pasado jueves, ha provocado un éxodo de miles de campesinos, principalmente hacia las cabeceras urbanas de Cúcuta, Ocaña y Tibú, ciudades del departamento de Norte de Santander al que pertenece el Catatumbo, o incluso a pasar la frontera selvática hacia Venezuela.
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