12/01/2025
Los de Hansi Flick no tuvieron inconvenientes y apabullaron por 5-2 al Merengue en Riad, Arabia Saudita. Es el primer título para el técnico alemán en el banco blaugrana.
El espectáculo de luces, mosaicos y drones que precedió a la final de la Supercopa de España fue solo el inicio de una noche inolvidable. En el Estadio King Abdullah, el Real Madrid y el Barcelona disputaron un Clásico que prometía intensidad y cumplió con creces, dejando como resultado un histórico 5 a 2 a favor del equipo catalán, que levantó su 15º trofeo en este certamen.
Desde el pitazo inicial, el partido se caracterizó por un ritmo vertiginoso. Apenas comenzado el encuentro, Lamine Yamal puso a prueba a Thibaut Courtois con un disparo que el arquero belga desvió al córner. Minutos después, Raphinha casi inaugura el marcador con un cabezazo que también exigió al portero madridista.
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Sin embargo, el Real Madrid respondió con contundencia: tras una recuperación de Vinicius Junior, Kylian Mbappé, en una jugada explosiva, marcó el 1 a 0 antes de los cinco minutos, dejando sin opciones al arquero Wojciech Szczesny.
El empate no tardó en llegar. Robert Lewandowski asistió a Lamine Yamal, quien mostró su habilidad innata para eludir a la defensa madridista y batir a Courtois con un remate ajustado. Más tarde, un penal señalado a Eduardo Camavinga por el VAR permitió que Lewandowski revirtiera el marcador, poniendo al Barcelona 2 a 1 arriba.
Clave. Raphina se lució y empujó al Barcelona en la final de este domingo.
El equipo blaugrana no detuvo su impulso. Poco antes del descanso, Jules Koundé envió un pase preciso que Raphinha capitalizó de cabeza para el 3 a 1. Y en una jugada que reflejó el desconcierto del Real Madrid, un error de Rodrygo permitió que Alejandro Baldé finalizara un contragolpe letal, sellando el 4 a 1 al término del primer tiempo.
En el complemento, el Barcelona mantuvo el control del partido. Aunque Vinicius y Rodrygo intentaron acortar distancias, el poste y la imprecisión les negaron el gol. Por el contrario, Raphinha amplió la ventaja con una espectacular jugada personal, marcando el 5 a 1 y desatando la celebración catalana con la tradicional "manita".
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El Real Madrid encontró un respiro gracias a un penal señalado por el VAR tras una falta de Szczesny sobre Mbappé. Aunque Rodrygo convirtió para el 5 a 2, el daño ya estaba hecho.
Con esta victoria, el Barcelona se consolida como el máximo ganador de la Supercopa de España, un logro que refuerza su confianza de cara a La Liga y la Champions League. En cambio, el duro golpe para el Real Madrid podría desencadenar cambios significativos en el equipo dirigido por Carlo Ancelotti.
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