El Gobierno de Milei evalúa vender edificios del Estado en desuso y recortar gastos en autos, viáticos y viajes

El flamante gobierno de Javier Milei se encuentra realizando auditorías en Ministerios, secretarías y distintos organismos de la Administración Pública Nacional. Desde La Libertad Avanza trabajan en una revisión de lo que llaman "privilegios" del Estado, es decir, gastos en autos, choferes, viáticos, viajes, teléfonos celulares, inmuebles del Estado en desuso, entre otros. Motivo por el cual, según trascendió, se espera un recorte en el presupuesto de todas estas áreas con el fin de brindar un mensaje de austeridad de cara a la sociedad.

Las auditorías comenzaron recién esta semana y a cada Ministerio se le dio la orden de revisar sus gastos. En tanto, el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, espera tener antes de fin de mes un inventario detallado de cada cartera. El fin es avanzar hacia lo que el gobierno libertario denomina como "modernización del Estado". Asimismo, se supo que hay presupuestos en la mira que se van a recortar. Como por ejemplo, el dinero que cada año el Estado nacional destina al mantenimiento y reparación de vehículos, que en 2023 fue de $7900 millones, de los que hasta ahora se utilizaron $4900 millones.

Otro de los gastos en los que se recortará será en el uso y mantenimiento de celulares y teléfonos fijos. En 2023 el presupuesto fue de $7000 millones. También se espera una revisión de los gastos en pasajes y viáticos que solo este año tuvo un presupuesto de $50 mil millones y en los que ya se gastaron 38 mil millones de pesos. En el Gobierno consideran que al haber suprimido ministerios y secretarías habrá una reducción de ambos conceptos, naturalmente.

Por otra parte, el Gobierno de Milei tiene la intención de vender edificios del Estado que no estén en uso o resulten irrelevantes. De acuerdo con los datos del Presupuesto Abierto, en 2023 el presupuesto para mantenimiento y reparación de edificios fue de $37.000 millones, de los que ya se usaron casi $17 mil millones. También se estudia la chance de implementar cambios en el uso de los aviones de la Secretaría General, los que solo podrán ser utilizados por ministros con agenda oficial. Se trata de un claro mensaje a la utilización que Cristina Fernández de Kirchner le daba a las naves oficiales si se tiene en cuenta que realizó numerosos traslados al sur del país durante los fines de semana sin actividad alguna.