La alianza de izquierda frena a la extrema derecha en Francia

Los votantes franceses parecen haber frenado al partido de extrema derecha, Agrupación Nacional (RN), liderado por Marine Le Pen, después de su avance significativo en la primera vuelta de las elecciones.

Los principales medios del país europeo han coincidido en que la alianza de izquierdas, el Nuevo Frente Popular (NFP), está en camino de lograr el triunfo. Sin embargo, aún se espera la publicación de los resultados oficiales para confirmar la composición final del Parlamento.

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Según las proyecciones, ningún grupo obtendría la mayoría absoluta en el Legislativo. La alianza centrista del presidente Emmanuel Macron ocuparía el segundo lugar, mientras que la extrema derecha quedaría en tercer lugar en términos de número de diputados.

Tras los buenos resultados de Agrupación Nacional en la primera vuelta, muchos candidatos de izquierda o centro se retiraron de la contienda en varias regiones, permitiendo que los votos anti-RN se concentraran en un solo candidato.

Anuncio. El primer ministro Gabriel Attai reconoció la derrota del oficialismo y aseguró que presentará su renuncia.

El Nuevo Frente Popular, que agrupa a socialistas, ecologistas, comunistas y La Francia Insumisa, se formó después de que el presidente Macron convocara elecciones parlamentarias anticipadas el 9 de junio. Aunque estos partidos han tenido diferencias en el pasado, se unieron con el objetivo de mantener a la extrema derecha fuera del poder.

El NFP ha prometido derogar reformas de pensiones e inmigración, crear una agencia de rescate para inmigrantes indocumentados y facilitar las solicitudes de visa. También busca poner límites al precio de productos básicos para combatir la crisis del costo de vida y aumentar el salario mínimo.

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Sin embargo, la falta de una mayoría absoluta en el Parlamento deja incierto quién gobernará Francia. Mucho dependerá del equilibrio de poder dentro del NFP, que incluye desde socialdemócratas hasta anticapitalistas. Algunos socialistas moderados podrían optar por unirse al grupo de Macron para formar un gobierno de centro izquierda.

Si no se logra una mayoría funcional, el presidente Macron podría pedir al partido más grande que forme un gobierno minoritario o nombrar un gobierno tecnocrático, aunque esto último podría tener una vida corta. La inestabilidad podría surgir, especialmente porque el presidente no puede convocar nuevas elecciones parlamentarias hasta dentro de un año.

Derrotada. "Nuestra victoria solo se ha visto postergada", manifestó Le Pen.

Jean-Luc Mélenchon, líder de La Francia Insumisa y figura prominente en la coalición de izquierda, instó a Macron a "admitir su derrota" y dimitir. "La extrema derecha está lejos de una mayoría esta noche... El resultado de la elección es fruto de un extraordinario esfuerzo movilizador", declaró.

Macron, por su parte, está "analizando los resultados", según un comunicado de la presidencia. El primer ministro actual, Gabriel Attal, anunció que, debido a que la coalición de gobierno no logró una mayoría, le presentará su renuncia al presidente.

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El partido de Marine Le Pen también reaccionó rápidamente a las proyecciones iniciales, aunque la dirigente de extrema derecha se mostró esperanzada: "Nuestra victoria solo se ha visto postergada", afirmó. "La situación del presidente Macron es insostenible", remarcó.

Por su parte, Jordan Bardella, su joven aliado político, criticó la "alianza deshonesta" de la izquierda, alegando que privó a los franceses de una victoria de RN.