La Iglesia le reclamó al Gobierno por los 5 millones de kilos de alimento sin entregar

Mientras apunta contra la creación de una infinidad de comedores presuntamente inexistentes, el Gobierno Nacional quedó expuesto en los últimos días luego que se conociera que tiene acopiados 5 millones de kilos de alimentos que deberían haber sido entregados a estas sociedades benéficas que contribuyen en los barrios más humildes.

En ese contexto, la Iglesia Católica agarró el guante y le pidió explícitamente a la administración del presidente Javier Milei que acelere la entrega de esa comida para los sectores que más la necesitan.

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El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor Oscar Ojea, señaló que existen "dos depósitos de alimentos que tienen cinco millones de kilos de alimentos guardados" en un video relativo a la conmemoración del 25 de Mayo.

"No entro en las razones por las que están guardados, pero pienso que en un tiempo de emergencia alimentaria esto debe llamarnos a la reflexión", sostuvo el Obispo de San Isidro.

"Rápidamente tienen que ser entregados, esta sensibilidad frente al pan que yo tengo y puede faltar en otras mesas va contra todo lo que significa, por ejemplo, cuando tiramos comida", remarcó.

"Mi abuela materna me decía que cuando tirara un poquito de pan, besara el pan y pensara que ese pan que yo pude comer y que no voy a comer hay otro que realmente lo necesita. Esto es lo que realmente nos preocupa, que se vaya perdiendo esta sensibilidad frente a un derecho que es y que es primario como es el derecho al alimento", concluyó Ojea.

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Mientras tanto, la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, presentó ante la Justicia datos de 1.607 comedores y merenderos que no pudieron ser certificados, ya sea porque no funcionan más, son inexistentes o brindaron una dirección falsa.

Desde el Gobierno apuntan a diferentes organizaciones sociales que manejarían estos espacios a lo largo y ancho del país. No obstante, todos los comedores solidarios quedaron en medio de esa disputa y sin alimentos para repartir.