La Policía Federal designó a nuevos directores generales, con una mínima representación femenina en la cúpula

En las últimas horas, la Policía Federal Argentina (PFA) oficializó los nombramientos de los nuevos directores generales, conformando así la segunda línea de la cúpula de la fuerza. Este paso se enmarca en el proceso de reorganización y reestructuración de la institución, que busca transformarse en una estructura más moderna y eficaz, similar al modelo del FBI en Estados Unidos, tal como lo anticipó en su momento la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

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La Orden del Día Interna (ODI) número 9, donde se oficializaron los cambios, incluyó la designación de la comisario inspector Myrian Claudia Serena al frente de la Dirección General de Administración. Sin embargo, la paridad de género dentro de los puestos de decisión es notablemente baja: solo una mujer ocupa un cargo de jefatura en el total de 43 direcciones de la fuerza, que se distribuyen entre las áreas de seguridad y operativas. Además de Serena, otra mujer, la comisario mayor Mirna Edith Speranza, fue nombrada para liderar la Superintendencia de Seguridad y Custodia, lo que deja a las mujeres con apenas un 4% de representación en la estructura más alta de la PFA.

Este hecho marca una diferencia con gestiones anteriores, donde las mujeres habían tenido mayor presencia en las esferas de decisión. Sin embargo, a pesar de este panorama, desde la PFA se destacó la importancia de continuar con la reestructuración, cuyo objetivo es mejorar la respuesta frente a los desafíos de la seguridad en el país.

Con la plana mayor conformada, solo resta esperar la reestructuración anunciada en la fuerza para convertirse en el nuevo "FBI argentino".

Entre los nombramientos más relevantes figuran comisarios mayores al frente de áreas clave, como Juan Carlos Barrales en Narcocriminalidad, Carlos Ernesto López Monet en Policía Científica, Darío Alejandro Montaña en Agencias Regionales Federales y César Fernando Orge en Orden Urbano y Federal. Asimismo, otros oficiales de alto rango como Domingo Adrián Espósito, Pablo Augusto Carcacci y Miguel Ángel Valle también fueron confirmados en diversas direcciones cruciales para la seguridad y la lucha contra el crimen organizado.

Con la nueva cúpula definida, se espera que la Policía Federal dé los próximos pasos en su transformación hacia una estructura más eficiente y profesional, que, según las autoridades, permitirá fortalecer la lucha contra el narcotráfico, los delitos complejos y las amenazas tecnológicas, entre otros.

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A pesar de los avances en la reorganización, la falta de representación femenina sigue siendo un tema que genera debate dentro de la fuerza, en un contexto donde diversas voces reclaman mayor equidad de género en los cargos de poder y decisión.

Con la nueva estructura ya en funcionamiento, se aguarda la implementación de reformas adicionales que permitan consolidar el modelo de seguridad propuesto por el gobierno.