Polémica por la cancelación del desfile de Malvinas: La palabra de Marcelo Iturbe, un veterano de Pilar

"Nosotros somos meros sobrevivientes. Los héroes son las 632 almas que todavía están en las Islas, que siguen en guardia permanente", reflexiona el excombatiente de Malvinas Marcelo Iturbe en vísperas del 2 de Abril próximo, que marcará el 42° aniversario del comienzo de la Guerra. La fecha, envuelta en polémica luego del anuncio del gobierno nacional de que no habrá desfile de veteranos este año debido a su "alto costo", despierta para el oriundo de Pilar otro tipo de homenaje: "La conmemoración es grata, pero nos sentimos honrados con ceremonias simples".

"El hecho de las grandes pomposidades, ceremonias y actos importantes... Nos sentimos honrados, tanto veteranos como familiares de caídos, con ceremonias simples. Hablo en primera persona: yo personalmente me siento muy muy honrado por la difusión de la Causa Malvinas. Y el 'No Olvidar' ya está presente y lo veo en el cariño de los chicos cuando voy caminando por Pilar", afirma, en diálogo exclusivo con El Bona TV, tras recibir la noticia de que el próximo Día de los Caídos y los Veteranos no contará con el tradicional desfile de las fuerzas, como lo comunicó esta semana la administración nacional.

La decisión del gobierno de Javier Milei fue motivada por la "crisis económica que vive el país", según informaron autoridades del Senado, que señalaron el "alto costo que implica organizar" la clásica marcha del 2 de Abril. A 42 años del comienzo del conflicto bélico en las Islas, el evento oficia como un símbolo de patriotismo y un homenaje institucional a los excombatientes que defendieron la soberanía argentina en las Islas - sin embargo, para veteranos como Iturbe, la importancia de la Causa no radica en los "actos y ceremonias grandes", sino en la enseñanza de "No Olvidar" la gesta.

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"Hoy por hoy, con lo que estamos viviendo en una situación tan crítica económica y después del desastre que ocasionó el temporal, yo personalmente no creo conveniente hacer gastos onerosos porque no lo merece. La conmemoración es grata, pero nos sentimos honrados con ceremonias simples. En el caso que me toca a mí, el intendente de Pilar Federico Achával hace el reconocimiento y el homenaje en forma personal con un abrazo, con estar siempre presente: eso que dicen del 'Estado Presente', lo mantiene, lejos de toda bandera política. Creo que es ahí donde nos sentimos contenidos", explica el excombatiente.

Y subraya: "Yo, al igual que muchos de mis compañeros, durante mucho tiempo estuvimos en silencio. Éramos la vergüenza por haber perdido la guerra, teníamos culpa por haber llegado y otros no. Todo eso por muchos años lo tuvimos guardadito, e incluso, salvo algunas raras excepciones, la sociedad también se olvidó un poquito de lo que allí nos habíamos esforzado para sostener una gesta que para nosotros fue muy importante. Pero desde el advenimiento de otras acciones políticas y la gente, las escuelas, las maestras, los chicos, empezó a tener resonancia el hecho de haber defendido nuestra Patria".

Los pormenores de la polémica: "Los chicos no tienen la culpa"

La cancelación del desfile de veteranos fue dada a conocer esta semana a través de las redes sociales del director de Gesta de Malvinas del Senado Nicolás Kasanzew, un excorresponsal de la Guerra que viajó a las Islas enviado por ATC para documentar desde allí el conflicto bélico a través de los lineamientos de la Junta Militar al frente de la dictadrua. "Este 2 de Abril, muy lamentablemente, no se podrá realizar el desfile que todos deseábamos. El alto costo que implica organizarlo lo hace imposible dadas las condiciones de la crisis económica que vive el país. Será para más adelante", comentó el funcionario.

La decisión provocó repercusiones en todo el arco político nacional al tiempo que las fuertes políticas de ajuste implementadas por el gobierno nacional se cobran una nueva víctima. Iturbe evita hacer mella en eso. Como uno de los últimos argentinos en pisar las Islas, este abril su llamado cobra especial relevancia: "Con muy poco se puede vivir, y hay mucha gente que está pasándola mal en serio, sobre todo los más chicos que no tienen la culpa de lo que nosotros los grandes hicimos con la política y con nuestro país. Entregar una bolsa de comida a la gente inundada, colchones a personas que realmente lo necesitan... Ahí es donde realmente se llena el alma".

Sol en el Cenotafio: "Hay 632 almas que siguen de guardia permanente"

Iturbe habla desde el Cenotafio de Malvinas de Pilar. Su rostro es iluminado por un radiante sol ya otoñal que vuelve a asomarse pasada la negra tormenta que azotó al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) en los últimos días. El predio, con "seis hectáreas de puro pasto", es un verdadero "lugar histórico", indica el veterano: "Lo creó el Padre Tito, nuestro cura allá en las trincheras. Aquí están las 632 representaciones de los caídos en combate, es una réplica del cementerio de Darwin; y tenemos la capilla, que también es una réplica de la que está en Puerto Argentino. Es muy emotivo".

Ese condenado número insiste en mezclarse entre las declaraciones de Iturbe, quien a la edad de 62 ya se considera "pasado en años". Su definición de sí encabeza la conversación: "Somos sobrevivientes. Los héroes son las 632 almas que todavía están en las Islas, que siguen en guardia permanente. Esos son los verdaderos héroes, que son los que dieron todo, dieron su vida. Nosotros somos meros sobrevivientes. Cargamos con todo lo que significó haber estado en la isla, con todos nuestros problemitas... Pero meros sobrevivientes". Y recuerda: "Si hay algo que aprendí en aquel momento, cuando tenía 19, 20, fue a vivir con muy poco".

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"De hecho, una situación que a veces no es importante pero en aquel momento sí: teníamos las raciones de combate, que eran unas latitas de comida, y con mi compañero de trinchera; entrañable, él no volvió; es más, volvió, pero se quitó la vida... Cuando teníamos que compartir la latita de ración, yo comía mi parte y le dejaba un poquito más de la mitad, y él comía la mitad de la mitad y también me pasaba su otro poquito. Y así nos lo íbamos pasando hasta llegar a rascar el fondo de la latita de raciones. Se puede vivir con poco, existe el pensar en los demás sin mirarse tanto el ombligo", completa.

Y concluye: "Ya estoy grande. Hoy tengo el recuerdo de mis amigos, los compañeros de trinchera, de los que algunos no volvieron. Sigo teniendo el karma de la culpa porque yo volví y me tocó verle la cara a la mamá de esos compañeros... La culpa nunca se me fue; al contrario, se acrecienta. Eso me perturba y creo que después de 42 años va a seguir siendo así. Mi mayor recuerdo y reconocimiento a esos verdaderos héroes que incluso en las peores condiciones, ya heridos y próximos a... Los comandantes ingleses pedían que se rindieran y a la voz de 'Viva la Patria' ellos dejaban todo. 'Viva la Patria, carajo', los escuché yo. Y los fusilaron. Eso es histórico, eso es Patria. En eso pienso".