Senadores peronistas desafían a CFK y arman un nuevo bloque en el Congreso

Con el calendario electoral en marcha, las divisiones internas, visibles tanto en las provincias como en el Congreso, han dado lugar a un nuevo capítulo en el Senado: este miércoles se oficializó la creación del bloque "Convicción Federal", un espacio que, aunque se mantendrá dentro de Unión por la Patria (UP), surge como una expresión crítica hacia la conducción de Cristina Kirchner.

Este nuevo grupo está compuesto por los senadores Guillermo Andrada (Catamarca), Fernando Rejal (La Rioja), Carolina Moisés (Jujuy) y Fernando Salino (San Luis), con Moisés como vicepresidenta y Salino como presidente. Los legisladores forman parte de un sector del justicialismo que había apoyado al gobernador riojano Ricardo Quintela en su fallida candidatura para liderar el Partido Justicialista (PJ) a nivel nacional, un intento que representó un desafío a la conducción de Cristina Kirchner. Según explicaron, "Convicción Federal" busca fortalecer una estrategia de apertura y debate interno, sumando voces que representen los intereses de sus provincias y se opongan al Gobierno Nacional en temas clave, como la agenda legislativa y proyectos específicos.

En su declaración, los senadores destacaron que el bloque responde a una demanda urgente de federalismo dentro del peronismo, un reclamo que diversos sectores vienen planteando con fuerza. "Hoy se expresa legislativamente en este nuevo espacio", afirmaron, subrayando que su objetivo es dar mayor visibilidad a las problemáticas regionales en el Senado. Actualmente, Unión por la Patria cuenta con 33 de los 72 legisladores de la Cámara alta, distribuidos entre los bloques Frente Nacional Popular y Unidad Ciudadana. Este año, se renovarán 24 bancas, de las cuales el peronismo ostenta 15, en jurisdicciones como la Ciudad de Buenos Aires, Entre Ríos, Chaco, Neuquén, Río Negro, Salta, Santiago del Estero y Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur.

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Mientras tanto, en las provincias, las fracturas del justicialismo se han hecho más evidentes con el cierre de listas para las elecciones locales del domingo 11 de mayo, donde también se renovarán legislaturas y cargos municipales. En Jujuy, por ejemplo, el PJ está intervenido, y la senadora Carolina Moisés optó por competir con un espacio propio, distanciándose de La Cámpora y otras agrupaciones alineadas con el Instituto Patria. Un panorama similar se observa en Salta, donde el gobernador Gustavo Sáenz, hoy cercano al gobierno nacional, recibirá el respaldo de peronistas que rechazan la intervención del partido liderada por Sergio Berni y María Luz Alonso. Sin embargo, un sector referenciado en Cristina Kirchner presentará su propia lista.

Foto: bloque de senadores de Unión por la Patria.

En Chaco, el peronismo se fragmentó en tres listas, siendo la del exgobernador Jorge Capitanich la más relevante. Con el plazo para oficializar candidaturas cerrándose este sábado, las negociaciones para alcanzar la unidad seguían intensas hasta últimas horas. San Luis, por su parte, también exhibe una división clara: el exgobernador Alberto Rodríguez Saá, históricamente opuesto al kirchnerismo, encabezará un espacio, mientras que otro frente integrado por fuerzas kirchneristas y afines competirá por separado. Estas cuatro provincias deberán definir sus listas este sábado, en un contexto de alta tensión interna.

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El surgimiento de "Convicción Federal" en el Senado y las disputas en las provincias reflejan un peronismo en plena ebullición, donde las lealtades partidarias se ponen a prueba ante las elecciones. Aunque el nuevo bloque no rompe con Unión por la Patria, su creación evidencia las dificultades para mantener la cohesión bajo el liderazgo de Cristina Kirchner. En un año electoral clave, con 24 bancas en juego, el justicialismo enfrenta el desafío de equilibrar sus diferencias internas y proyectar una oposición efectiva al Gobierno Nacional, mientras las provincias marcan el pulso de una lucha por el poder que trasciende las fronteras legislativas.