Conmoción en Quilmes: un nene de 12 años mató a su padrastro a puñaladas por pegarle a su mamá

Un menor de 12 años mató a puñaladas a su padrastro, Rubén Cardozo, de 37 años, en el barrio Los Eucaliptos de San Francisco Solano, Quilmes durante la madrugada del pasado martes. El niño habría intentado defender a su madre, una mujer de 40 años, mientras era agredida por el hombre quién habría arribado al domicilio en aparente estado de ebriedad.

De acuerdo con la declaración de la mujer, Cardozo llegó al domicilio durante la madrugada y comenzó a golpearla mientras dormía, llegando incluso a intentar asfixiarla. En la casa estaban presentes cinco hijos de la víctima, entre ellos el menor de 12 años y dos hijos menores del fallecido. Alertado por el alboroto, el niño ingresó a la habitación, tomó un cuchillo de la cocina y atacó al hombre, hiriéndolo al menos cuatro veces en la espalda. Cardozo falleció en el lugar a causa de las heridas antes de que llegaran los servicios de emergencia.

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El SAME y la Policía Bonaerense acudieron tras un llamado al 911. Los médicos confirmaron el deceso, mientras que los peritos recolectaron pruebas, incluyendo el arma utilizada, hallada en la cocina. La autopsia determinó que las puñaladas fueron letales, y se espera un informe toxicológico para confirmar el estado de intoxicación del agresor. La madre presentaba lesiones visibles en rostro y cuello, consistentes con el ataque descrito.

El hecho tuvo lugar mientras otros hijos del agresor también se encontraban en la vivienda.

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La investigación está a cargo de la Fiscalía N° 1 de Menores de Quilmes, bajo la dirección de María Julia Bottaso, quien analiza el caso como un posible homicidio en legítima defensa, enmarcado en un historial de violencia de género. Registros judiciales indican que M. A. había denunciado a Cardozo en 2023 por agresiones, aunque no se tomaron medidas preventivas como una restricción perimetral. Testimonios de vecinos corroboran que las peleas y actos violentos eran habituales en el hogar.

Dada su edad, el menor no puede ser penalmente responsable según la ley argentina, que fija la imputabilidad a partir de los 16 años. Tras una evaluación inicial, fue entregado a su familia, y la Secretaría de Niñez y Adolescencia de Quilmes dispuso asistencia psicológica para él y su madre. La hermana mayor, Candela, defendió la acción del niño, afirmando que actuó para proteger a su madre de una situación límite.

Este caso resalta las fallas en la protección de víctimas de violencia de género y las consecuencias extremas que pueden derivarse de la inacción. La Justicia busca esclarecer los detalles del incidente, mientras las autoridades locales trabajan para brindar contención a la familia afectada.