07/12/2023
El presidente participó de su última actividad oficial antes del traspaso. Impulsó un tratado comercial con China y valoró su relación con Lula: "Sellamos una amistad de por vida". Sus declaraciones.
El presidente de la Nación Alberto Fernández participó este jueves de la que fue su última actividad oficial antes de la ceremonia de traspaso del 10 de diciembre próximo, cuando le ceda el mando del Ejecutivo al mandatario electo Javier Milei. El jefe de Estado saliente viajó a Brasil para asistir a la 63° Cumbre del Mercosur, donde se debatió un Tratado de Libre Comercio (TLC) entre el bloque sudamericano y la Unión Europea (UE) del que el titular de la Casa Rosada procuró alejarse: "Es un acuerdo imprescindible, pero exige que todos ganen".
"En este mundo convulsionado y conmocionado, es un acuerdo geopolíticamente imprescindible para no quedar atrapados en la bipolaridad de China y Estados Unidos; pero que sea imprescindible exige que nos sirva a todos, que sea un pacto donde todos ganen, porque si va ganar uno y el resto va a perder, ese no es un buen pacto", sostuvo el presidente desde Río de Janeiro, ciudad a la que arribó este jueves para formar parte de la 63° edición de la Cumbre de Jefes de Estado de la agrupación, la última durante su gestión.
Acompañado por sus pares de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; de Uruguay, Luis Lacalle Pou; de Paraguay, Santiago Peña; y de Bolivia, Luis Arce; el mandatario aseguró que todos los países miembro del bloque tienen "la misma voluntad de hacer fuerte el Mercosur". Durante la Cumbre también se realizó la ceremonia de firma y entrega de la Carta de Ratificación de Adhesión de Bolivia a la asociación comercial y se suscribió un TLC regional con Singapur. Además, Fernández subrayó la importancia de un acuerdo entre Sudamérica y China.
"Creo que deberíamos avanzar con China en un acuerdo con Mercosur pero que atienda todas las realidades. Yo me voy del gobierno con una sincera e inmensa gratitud con el presidente Xi Jinping porque cada vez que lo necesité estuvo al lado mío, y me ayudó una y mil veces. Cuando empezó la pandemia, mandándome insumos; cuando transcurrimos la pandemia, mandándome vacunas; cuando teníamos que hacer frente a la carencia de dólares; cuando tuvimos que pagarle al Fondo, siempre estuvo China ayudando", consideró.
A su vez, remarcó que la incorporación de la Argentina al bloque de BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) podría "generar un escenario para ver cómo lograr esos acuerdos", si bien añadió que "existen situaciones muy asimétricas y hay que ponerse a trabajar para ver cómo resolverlas". Asimismo, subrayó el peso de otras agrupaciones como la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y exigió reformular el vínculo con los organismos multilaterales de crédito, con foco en el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Luego mencionó: "En el mundo está naciendo un nuevo debate geopolítico que pone en crisis la hegemonía estadounidense. Ya no hay más una guerra ideológica, y lo que se avecina es una enorme guerra comercial con dos protagonistas: uno que no quiere ceder y se siente más débil, que es Estados Unidos, y otro que se siente potente, que es China, que se presenta como líder del multilateralismo"; y analizó: "Europa está crujiendo. Primero se rompió el Brexit, y la guerra entre Rusia y Ucrania los ha puesto en una situación realmente incómoda".
Por su parte, Fernández aprovechó para agradecer a Lula por recibirlo en su última actividad oficial como titular del Ejecutivo. "Es una alegría terminar mi mandato en tu compañía, con tu abrazo, tus palabras, tu cariño y tu afecto. Tengo la tranquilidad de que, en el abrazo que nos dimos en esa pequeña celda -en la que el mandatario brasileño estuvo preso- sellamos una amistad de por vida, que efectivamente no va a morir nunca, seamos o no presidentes", aseguró el dirigente argentino.
Encontrarme con mi querido @LulaOficial es siempre un motivo de alegría.
Hoy, en Río de Janeiro, Brasil ??, participaremos de la LXIII Cumbre del @mercosur. pic.twitter.com/NBTt0aQ1Uq
En otro tramo del discurso, el jefe de Estado se refirió al conflicto entre Venezuela y Guyana por la zona de Esequibo, un territorio de 160.000 kilómetros cuadrados que Caracas considera que le corresponde. Al respecto, indicó: "No está bien, porque hay una cosa que tiene Latinoamérica que lo diferencia de todo el mundo: tal vez sea la única región de paz. Y no debemos dejar que eso se pierda, con lo cual, todo el esfuerzo que podamos hacer para acercar posiciones, hagámoslo".
Junto a ello, el presidente saliente expresó su voluntad de que se levante los bloqueos a Venezuela y a Cuba. También se refirió a la guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino de Hamas, cuestión sobre la que se mostró preocupado ya que todavía "hay 20 argentinos secuestrados" por la organización militar y "no se sabe hasta dónde puede escalar" el conflicto armado. "Está pasando de todo en el mundo", completó Fernández, quien regresará a Brasil para participar de la asunción de Milei el domingo próximo.
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