11/01/2024
Como gesto de austeridad, el presidente planea ir y volver el mismo día y llevar una comitiva reducida. Dijo que recibió "más de 60 pedidos" para bilaterales, pero aún no hay ninguna ratificación. Los detalles.
El debut del presidente de la Nación Javier Milei en el Foro Económico de Davos la semana próxima se plantea como un viaje reducido al mínimo en prácticamente todos los aspectos de la cita internacional: será una "visita express", en lo posible con la vuelta del jefe de Estado el mismo día; habrá un puñado de reuniones bilaterales como máximo, aunque ninguna ha sido confirmada aún; y el jefe de Estado dará un discurso fugaz, de 22 minutos solamente, antes de retirarse del encuentro.
En una travesía que se plantea en línea con el ajuste que impone la administración de La Libertad Avanza en el área fiscal, el gobierno propone mantener al ras del suelo el despliegue económico para la asistencia de Milei al evento en Suiza. Por eso, y si bien los detalles del viaje todavía permanecen bajo revisión, lo más probable es que el presidente sea acompañado por una comitiva pequeña y que su pasaje por la ciudad europea sea lo más corto posible. Desde el Ejecutivo insisten con una visita "express".
Si la logística lo permite, la intención del mandatario es arribar y regresar de Davos el mismo día, el 17 de enero. Viajará junto a algunos de sus más cercanos miembros del gabinete: su hermana, la Secretaria General Karina Milei, estará con él ida y vuelta. Junto a ambos partirán desde Buenos Aires el jefe de Gabinete Nicolás Posse, el ministro de Economía Luis "Toto" Caputo y la canciller Diana Mondino, quienes, en principio, se quedarán en Suiza durante todo el evento. También podría sumarse el embajador argentino en Estados Unidos Gerardo Werthein.
A tono con la extensión de la visita, la agenda de Milei se perfila escueta. Según trascendidos periodísticos, el mandatario prepara un discurso de 22 minutos junto a su equipo. Tras su disertación, el resto de su participación se destinará a reuniones bilaterales con representantes de otras economías del mundo. Esta mañana, el presidente afirmó que ya ha recibido "más de 60 pedidos" para encuentros diplomáticos durante su visita; no obstante, todavía ninguna ha sido confirmada, y si su estadía en Suiza termina por ser tan breve como se plantea, tampoco quedará más tiempo para más citas.
Quienes sí podrían protagonizar conversaciones con delegaciones de otros países son Posse, Caputo y Mondino, quienes aparecen apuntados como "los voceros" del gobierno de La Libertad Avanza en Davos, motivados por su expectativa en el avance del mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y la "Ley Ómnibus" que se debate en estos días en el Congreso, que incluyen una extensa cantidad de medidas en favor de la apertura y desregulación económicas y de la reforma del Estado que, creen desde el Ejecutivo, podrían ser vistas con buenos ojos por sus pares.
Un último tema es aún fruto de discusiones en la cúpula de la administración liberal libertaria: como gesto de austeridad y de su ofensiva a la "casta", Milei insiste con su intención de viajar a Suiza en un vuelo comercial. Ya hizo la prueba piloto la semana pasada con su traslado a Santa Cruz en el marco de su visita a la Base Marambio en la Antártida. Pero desistir de usar el avión presidencial no solo enciende las alarmas por las evidentes cuestiones de seguridad en juego, sino también porque podría extender los tiempos a raíz de las posibles escalas que deba completar el mandatario.
COMPARTE TU OPINION | DEJANOS UN COMENTARIO
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.