Independiente: cerraron la sede Bocayá en CABA por falta de pago y crece la tensión con el departamento de fútbol

El Club Atlético Independiente atraviesa una profunda crisis económica que obligó al cierre temporal de la sede Bocayá, ubicada en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). La decisión se tomó debido a la imposibilidad de abonar los salarios al personal, lo que generó un conflicto interno que también salpica al departamento de fútbol profesional.

Según fuentes cercanas a la institución de Avellaneda, la deuda acumulada con empleados administrativos y de mantenimiento derivó en un cese de actividades en la sede Bocayá, utilizada tradicionalmente para eventos sociales, actividades deportivas y reuniones institucionales. La falta de ingresos, sumada a la mala gestión financiera de los últimos años, ha llevado al club a tomar decisiones drásticas para intentar contener el déficit.

La situación ha generado una fuerte tensión entre la dirigencia del club y el departamento de fútbol, que reclama mayor apoyo económico y considera que las decisiones recientes afectan directamente la estructura y el funcionamiento integral de la institución. En paralelo, algunos sectores de la hinchada y socios expresaron su malestar a través de redes sociales, exigiendo transparencia en la administración de los recursos.

En este contexto, el futuro de la sede Bocayá permanece incierto. Mientras se evalúan posibles medidas para normalizar la situación, crece la preocupación por el impacto que esta crisis pueda tener en otras áreas del club, incluyendo las divisiones inferiores y las actividades formativas.

El Club Atlético Independiente, uno de los grandes del fútbol argentino, enfrenta así uno de sus momentos institucionales más delicados, con la esperanza de encontrar una solución que permita estabilizar sus finanzas y recuperar la confianza de su comunidad.